Noche de fin de semana con música, sexo y alcohol. Una combinación explosiva que a veces estalla cuando muchos adolescentes establecen relaciones sexuales con o sin protección, en las que muchas chicas terminan con la incertidumbre de un posible embarazo. A partir de aquí, el miedo a esa concepción llevó el año pasado a 6.292 personas a empezar un largo peregrinaje en las urgencias de los centros de salud, las consultas privadas y los hospitales de la provincia en busca de la píldora del día siguiente.