El convoy del metro de Valencia accidentado ayer, que causó la muerte de 41 personas, doblaba la velocidad permitida para el tramo donde descarriló y eso "hace sospechar" que su maquinista pudo sufrir "algún tipo de inconsciencia o indisposición que impidiera su reacción". El maquinista había realizado 224 horas de prácticas y conducía desde el mes de abril. Por otra parte, ya se han identificado a todas las víctimas mortales, que han sido recordadas en el funeral celebrado en la Catedral de Valencia con la presencia de los Reyes y numerosas personalidades.