ETA ha protagonizado al fin el gesto esencial que el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero y las fuerzas políticas le habían reclamado para poder emprender formalmente el camino hacia la paz en el País Vasco. La organización terrorista anunció a mediodía, a través de un comunicado acompañado de un vídeo remitido a EiTB y los diarios Gara y Berria, su decisión de decretar un «alto el fuego permanente» que entrará en vigor a partir de mañana, siete años y seis meses después de la tregua incondicional e indefinida que declaró el 16 de septiembre de 1998 al calor del Pacto de Lizarra. A diferencia de entonces, la banda ha dejado esta vez para las hemerotecas una escueta declaración de apenas veinte líneas, escrita con un lenguaje alejado de su tradicional beligerancia y que hoy se verá amplificada por un nuevo mensaje en el que concretará sus intenciones.