Desconocida como ella sola, adentrarse en esta provincia es como sacarse una entrada para un festival de descubrimientos inéditos. De la Casa del Cangrejo de Río al Canal de Castilla pasando por la Villa Romana mejor conservada de España, he aquí seis razones para explorar a conciencia la Tierra de Campos.
Un edificio de diseño para cangrejos
Pues sí. Desde el pasado mes de abril los cangrejos tienen su propio hogar: gigante y con diseño ultramoderno para más señas, en el municipio de Herrera de Pisuerga. Al edificio, diseñado por el arquitecto burgalés Jesús Arribas, se accede cruzando una pasarela sobre el río Burejo. En el interior de este vanguardista Centro de Interpretación, galardonado con el Premio Construcción Sostenible de Castilla y León, el despliegue para contar los detalles que rodean la existencia de estos pequeños animales es espectacular e incluye efectos como que el agua del río interactúa con el sótano para mostrar a los cangrejos en su hábitat natural.
Por lo visto, los cangrejos abundan por aquí y los lugareños los veneran y degustan con fruición, sobre todo cocidos y aderezados con aceite de oliva, tomates, ajo, perejil y un toque de guindilla. Por cierto, que se pueden probar en el propio bar-restaurante del segundo piso. Otras veces, sin embargo, organizan fiestas en su honor, como sucede cada primer fin de semana de agosto con el «Festival Nacional de Exaltación del Cangrejo de Río». Este peculiar evento alcanza ya su 43 edición y su programación incluye proclamación de reinas y damas, nombramiento de caballeros de la Orden del Cangrejo, un desfile de carrozas con cangrejos gigantes y hasta una quema nocturna de la falla del cangrejo.