El PPdeG reprocha a Besteiro que mantenga como defensor a Pumpido
El portavoz popular cree que «cualquier político sensato» no se pondría en manos de alguien bajo sospecha
Continúa la polémica sobre las supuestas presiones del abogado Cándido Conde-Pumpido hijo hacia la juez Pilar de Lara para que no investigase el caso por el que el líder de los socialistas gallegos, José Ramón Gómez Besteiro, acabaría siendo imputado. Después de que ABC publicase ayer el contenido de una carta que el letrado envió al portavoz popular en el Congreso, Rafael Hernando, en la que le instaba a que «si quiere pedir alguna explicación» se dirigiese directamente a él y no a Pedro Sánchez, ayer se pronunció sobre la cuestión el portavoz del PPdeG, Miguel Tellado . El popular subrayó que «cualquier político sensato» renunciaría a ser defendido por un abogado que está «bajo las sombras de duda» que pesan sobre el hijo del exfiscal general del Estado.
Noticias relacionadas
- El hijo de Conde-Pumpido abronca a Hernando por pedir explicaciones sobre presuntas coacciones a Sánchez
- Sorpresa en el TS por el carpetazo al caso del hijo de Conde-Pumpido
- La juez De Lara podrá investigar «exhaustivamente a Gómez Besteiro»
- El CGPJ frena un caso de posibles coacciones a De Lara
- Besteiro prolonga su calvario judicial tras negarse a declarar ante De Lara
- Denuncian al abogado de Besteiro por «un extraño proceder» con una testigo
«Entiendo que usted está haciendo política, pero aun así le pido que no se dirija a Sánchez, porque que ni me conoce, ni sabe nada de dicha actuación», apuntaba el defensor de Besteiro ante la sorpresa de Hernando, al que también instaba a que «hable con el señor Feijóo» sobre el historial de la magistrada para tener información sobre sus actuaciones. Además, Conde-Pumpido requería en la misiva una cita con el portavoz del PP en la Cámara Baja para «aclararle personalmente todo lo que entienda necesario».
«Sorprende que Besteiro dé su visto bueno a una campaña de XGS de mal gusto y que parece pensada para desacreditarlo»
Sin entrar en consideraciones más profundas sobre el contenido de la carta, Tellado animó a la reflexión a Gómez Besteiro sobre la conveniencia de mantener a Conde-Pumpido al frente de su defensa , no sin antes volver a poner encima de la mesa la gravedad de las acusaciones en las que se ve envuelto, ya que entiende que supuestamente «coaccionó y animó a mirar para otro lado a una juez ante la sospecha de un caso de corrupción».
«Campaña interna»
Sin alejarse del PSdeG ni de la situación de su líder, Miguel Tellado también se refirió a lo que entiende que es una «campaña interna de desgaste» contra la figura de Gómez Besteiro orquestada desde su propio partido. «No se puede entender de otro modo que semana a semana el portavoz parlamentario socialista lleve a las sesiones de control preguntas sobre imputados, cuando su jefe de filas está imputado por cuatros delitos relacionados con la corrupción urbanística» le espetó. De hecho, en este sentido recordó que una parte del acuerdo de investidura de Pedro Sánchez con ciudadanos pasaría por prohibir que los imputados pudiesen concurrir a las elecciones, algo que el popular entiende como «una demostración de que Sánchez está dispuesto a entregar en bandeja la cabeza de Besteiro ».
Y en el marco de este mar de fondo que ve en el seno de los socialistas calificó de «desafortunada» la campaña propagandística que anunciaron el jueves las Xuventudes Socialistas de Galicia en las que animan a señalar las «cagadas» de Feijóo. «Me preocupa que Besteiro haya dado el visto bueno a algo que, por una parte es de mal gusto, y por la otra busca su descrédito ante un proceso de primarias que se le antoja muy difícil».
Tuvo tiempo el portavoz conservador a un reproche más, que se hizo extensible a todos los partidos de izquierda. Tellado afeó que se haga un «uso partidista de las instituciones» ante la supuesta utilización de recursos municipales de algunas localidades costeras para «alquilar buses para protestar contra un anteproyecto de Ley de Acuicultura ya retirado». «Lo mínimo sería que las protestas las pagasen quienes las promueven», concluyó.
