Mariano Rajoy, poco propenso a hacer declaraciones en los pasillos del Senado, ha roto su rutina y nada más llegar a la Cámara Alta, donde esta tarde se somete a la sesión de control, ha recalcado la importancia de que las víctimas del 11-M hayan celebrado "unidas" el décimo aniversario de uno de los atentados más terribles en la histroria de España".
El presidente del Gobierno ha asegurado que lo más importante es que "las víctimas se sientan reconfortadas" y que cuenten siempre con el apoyo de todos los españoles.
Rajoy, además, ha incidido en que el objetivo es que ataques como el 11-M no se vuelvan a repetir jamás en nuestro país, lo que significará que la sociedad española "ha ganado definitivamente la batalla al terrorismo". Tras esta declaración, el jefe del Ejecutivo ha declinado responder a las preguntas de los periodistas.