Entre los paisajes más bonitos de Extremadura están los de sus valles; y en otoño, con hojas marrones decorándolo todo, resultan quizá más atrayentes que nunca. Pero los valles extremeños no son sólo lugares que contemplar: están llenos de vida. Durante estos meses se organizan en ellos muchas actividades para divertirse en plena naturaleza.
El valle del Ambroz vivirá un «Otoño Mágico» durante todos los fines de semana de noviembre. En él tendrán cabida rutas senderistas que no sólo pretenden mostrar la belleza de los bosques locales, sino también dar a conocer la forma de vida de sus pueblos, sus costumbres. Costumbres como el pastoreo, que será el protagonista de la VI Fiesta de la Trashumancia (22 de noviembre), con pasacalles, mercados, talleres... Por supuesto, también habrá especial atención a la gastronomía, con las setas entre lo más destacado.
[Más información: Turismo de Extremadura.]