El presidente estadounidense, George W. Bush, hizo un llamamiento ayer al cese de la violencia desatada por la publicación de caricaturas de Mahoma en la prensa europea, subrayando su rechazo a la «violencia como medio para expresar descontento con lo que se ha impreso en la prensa libre». «Pido a los gobiernos de todo el mundo que detengan la violencia, sean respetuosos, protejan las propiedades y protejan las vidas de los diplomáticos inocentes que están sirviendo a sus países en el extranjero», añadió.