Muchos gaditanos le conocen, pero casi todos los españoles con más de 40 años de vida han escuchado cosas suyas. No, no se trata de comentarios, ni de referencia a su persona, esas cosas suyas son piezas de la banda sonora de aquella España sepia que se limpiaba las penas, los rencores y los atrasos con coplas que salían de los aparatos de radio, los teatros y las pantallas de cine. Salvador Guerrero Reyes es el autor de una, enorme, parte fundamental de ese legado musical y oral, que podrá gustar más o menos, podrá apasionar para bien o para mal, pero representa con la fidelidad del calco una etapa de la sociedad española del siglo XX.