La vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, apeló al PP a «no quedarse fuera» de la reforma del Estatuto de Andalucía y dijo que «o ahora entran o se volverán a quedar fuera para los próximos 25 años».
En un desayuno informativo, Fernández de la Vega se refirió a la polémica por la definición de Andalucía como una «realidad nacional» y dijo que esta expresión «se viene utilizando desde hace muchos años sin problema», y que «lo importante» es que esta comunidad tendrá «más autogobierno» con el nuevo Estatuto.
La vicepresidenta primera confió en que el presidente de Andalucía, Manuel Chaves, y el del PP andaluz, Javier Arenas, lleguen a un acuerdo en la reunión que tienen previsto celebrar en próximas fechas porque «es bueno para Andalucía, para los andaluces y para el PP». Añadió que si el PP «se queda fuera» del acuerdo, como ocurrió en la aprobación del Estatuto vigente, el PSOE seguirá «gobernando en solitario y en silencio cincuenta años más» en Andalucía.
Preguntada por si la definición de Andalucía como una «realidad nacional» que apoya el PSOE andaluz «intenta tapar en algún sentido» la definición de Cataluña como nación, Fernández de la Vega respondió que es «un poco ingenuo» pretender «tapar algún debate que ya se ha producido» porque «llevamos meses y meses debatiendo sobre ese tema y tampoco creo que haya pasado nada».
Según la vicepresidenta primera, la expresión «realidad nacional», de la misma forma que el himno nacional, o la fiesta nacional» se viene utilizando «desde hace muchos años en este país sin problema».
Subasta de identidades
Por su parte, el secretario general del PP, Ángel Acebes, criticó que el presidente de la Junta de Andalucía haya «claudicado» ante las necesidades políticas del PSOE «y haya acabado metiendo a Andalucía a empujones en una subasta de identidades sin importarle los intereses de los andaluces». «Su único objetivo», dijo, «es satisfacer a los nacionalistas con los que el presidente del Ejecutivo lleva a cabo su proyecto político excluyendo al PP».
El secretario general del PP explicó que su partido hará «todo lo posible» para evitar que Andalucía «se sume a las maniobras contra la Carta Magna y el consenso constitucional». A su juicio, las declaraciones de representantes del PSC y de CiU afirmando que les parece bien el nuevo estatuto andaluz «sería motivo de suficiente preocupación, pero Chaves no la tiene o no la demuestra porque se somete a las directrices que le da Zapatero».