Dimite el primer ministro de Lesoto, Thomas Thabane, acusado de asesinato

Tras cuatro meses en la cuerda floja, Thomas Thabane ha renunciado oficialmente a su cargo como primer ministro de Lesoto. Se cierra así el capítulo que ha sumido al pequeño reino montañoso en una profunda crisis política desde febrero cuando la policía encontró indicios de la posible implicación de Thabane y su actual mujer, Maesaiah, en el asesinato de su primera esposa, Lipolelo , el 14 de junio de 2017. Su sucesor, el Dr. Moeketsi Majoro, podría jurar el cargo antes de que termine la semana.

«El trabajo que me asignaron puede no haber terminado, pero finalmente ha llegado el momento de retirarse del gran teatro de acción, y despedirse de la vida pública y el cargo», dijo Thabane, de 80 años, en un mensaje televisado. Ayer el todavía primer ministro comunicó su intención de dejar el puesto, por segunda vez desde febrero, aunque no especificó fecha y reivindicó que seguiría siendo líder de la Convención de Todos los Basothos (ABC, por sus siglas en inglés). Él, que niega toda implicación en el asesinato de Lipolelo Thabane, echa balones fuera y dice ser víctima de una «caza de brujas»: «Debido a la polarización política profundamente arraigada en nuestra sociedad, algunos decidieron usar mi anuncio (de renunciar a finales de julio) para obtener ganancias políticas, mientras que otros arraigaron la división entre los basoto.»

Su esperada renuncia supone el fin de una era. Llegó al poder por primera vez en 2012 como jefe del primer gobierno de coalición del país, formado después de una votación no concluyente. Su primer mandato trajo esperanzas de estabilidad a Lesoto , pero el segundo fue sacudido por el asesinato de Lipolelo. Juró su cargo en 2017 tan solo dos días después de que su primera esposa, de la que se estaba divorciando, fuera tiroteada en la puerta de su domicilio. Su larga y compleja carrera política se remonta a la independencia y el veterano líder ha estado implicado en los principales cambios políticos del reino montañoso, como cuando el país pasó de ser «rehén» del estado del apartheid a ser vecino políticamente inestable de una Sudáfrica recién democrática. Los cambios que Thabane diseñó marcaron el camino para la llegada de los gobiernos de coalición a Lesoto y las transferencias pacíficas de poder después de las elecciones, pero también sirvieron para un estancamiento legislativo. Ahora deja el poder acusado de asesinato –no formalmente debido al cargo que ostentaba hasta el martes- y tras protagonizar graves episodios como cuando sacó a los militares a las calles para «restaurar el orden» hace apenas unas semanas y que precipitó su caída.

Thabane se jactaba hace poco de haber dado ejemplo a otros líderes africanos que se aferran al poder: «Estoy tratando de sentar un precedente de que los líderes en África deben ofrecerse voluntariamente para irse cuando piensan que es hora de irse o, en el peor de los casos, deben irse cuando termine su mandato». Sin embargo, su dimisión llega tras meses de presiones políticas en los que podría haber estado negociando una «jubilación digna y tranquila» , o lo que es lo mismo que no sea acusado formalmente de asesinato, algo que su propio partido se ha apresurado a desmentir.

El primer gobierno de coalición de cuatro partidos que llegó al poder después de las elecciones de 2017, liderado hasta ahora por Thabane, «colapsó» en la Asamblea Nacional el pasado lunes. El ABC acordó entonces la formación de una nueva coalición con el partido de la oposición, Congreso Democrático, y el nombre de Moeketsi Majoro, de 58 años , empezó a sonar como sucesor. Motlalentoa Letsosa, del DC, anunció que espera que el que fuera ministro de finanzas jurara como primer ministro esta semana y nombrara a su nuevo gabinete antes del viernes de la próxima semana. Por su parte, Majoro dijo el martes que estaba esperando a que el Rey Letsie III lo convoque para la ceremonia de inauguración donde jurará como primer ministro de Lesoto.