ARTES&LETRAS CASTILLA-LA MANCHA

Del tiempo y sus caminos (24): Comedia y sátira

«Sin duda, interesa descubrir la causa de nuestra risa...la sátira es otra cosa»

POR BEATRIZ VILLACAÑAS

Hay cierto elemento de fascinación en aquello que nos hace reír. Descifrar, entender, lo que nos provoca la risa ha sido campo de estudio no sólo de escritores y filósofos, pues la psicología también ha venido ocupándose de ello. Y es que, sin duda, interesa descubrir la causa de nuestra risa. Según se ha visto y se ha comprobado, parte importante de dicha causa está en el equívoco y en la sorpresa . La comedia ha venido haciendo uso de esto durante siglos: desde los clásicos latinos Plauto y Terencio hasta Shakespeare , entre muchos más ejemplos, vemos y experimentamos la risa cuando el personaje se confunde y esto da lugar a situaciones para él imprevistas. Siempre que estas situaciones no sean nada trágico, por supuesto. Nos gusta reírnos de las confusiones de los otros y también, a veces, de nosotros mismos cuando nos identificamos con no pocos personajes de las comedias. La comedia, por lo general, además de hacernos reír, no pocas veces consigue esta identificación, pues a menudo s us personajes, con sus errores humanos, suelen caernos simpáticos . Los cuatro jóvenes enamorados protagonistas de El sueño de una noche de verano , de William Shakespeare, con sus confusiones y sus cuitas amorosas, podrían ser nosotros mismos en nuestra primera juventud. Y cuánto nos alegramos del final feliz de todos ellos, de su feliz emparejamiento. Y, cuando no hay identificación, como en el caso del grupo de incultos atenienses de esta misma obra que se preparan para representar nada menos que la tragedia de Píramo y Tisbe , algo que les viene grande, nos reímos de ellos y de su mal uso del lenguaje, pero no dejan de resultarnos simpáticos porque carecen de maldad, son ignorantes e inocentes.

La sátira es otra cosa. Entre los personajes satirizados y nosotros se produce un distanciamiento, pues e l autor satírico no muestra errores inocentes, sino actos rechazables : los codiciosos y embusteros personajes de la sátira Volpone, or the Fox (Volpone, o el zorro ), de Ben Jonson, son capaces, con tal de conseguir el legado del protagonista, Volpone (astuto como un zorro), de caer en actos tan repugnantes como, en un caso, desheredar al propio hijo y, en el otro, prostituir a la esposa: todo por ganarse el favor y el dinero de Volpone, quien los está engañando y se ríe de ellos. Con esto no hay identificación posible, pues la sátira suele tener una finalidad didáctica, moral: se trata de que rechacemos a los personajes al sentir repugnancia por sus actos . Aunque, eso sí, la sátira también nos hace reír, y mucho.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación