Cádiz CF

Cádiz CF: Llegaron las dudas

El Cádiz CF ha transmitido una imagen de equipo muy limitado en casi todas las citas de esta temporada

Ante el Espanyol, sin hacer un buen partido, no se jugó mal pero lo que asusta es comprobar que eso no da para ganar

El Cádiz CF no pasa por su mejor momento. EFE
Pepe Reyes

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Una fundada, progresiva, desazonada preocupación empieza a cundir en el cadismo. Esa imagen de equipo muy limitado que ha transmitido el Cádiz CF en casi todas las citas de esta campaña pareció ahondarse en el reciente duelo frente al Espanyol, donde la afición se ha deslizado ya por el agrio terreno de la congoja, del pálpito doliente, de la circunspecta resignación. Y no fue el partido del pasado lunes de los peores que le hemos visto últimamente a los amarillos.

Antes, al contrario, la imagen que ofrecieron en la primera parte resultó mucho más esperenzadora que en ocasiones precedentes. Se adelantaron líneas, se robaba el balón con relativa prontitud y hasta se consiguió que gran parte del tiempo se jugara en campo rival. Solo un disparo desde fuera del área, envenenado por el desvío de un defensor, y una perfecta ejecución de una estrategia a balón parado constituyeron las dos únicas veces que el contrario pudo crear peligro. Incluso Rubén Sobrino pudo adelantarnos en el marcador si hubiera acertado en un remate franco tras buen centro de Tomás Alarcón.

Pero llegó el último minuto fatídico de ese período para desbaratar el buen trabajo realizado. Dos saques de esquina consecutivos, concedidos de manera ingenua y evitable, bastaron para obligarnos a afrontar el segundo periodo con la necesidad imperiosa de remontar. Instante éste donde se gesta la tragedia del equipo. Sendas ocasiones, arribado ya el tiempo de prolongación, significaron el único peligro creado en más de 45 minutos. Exiguo bagaje para el que le resultaba perentorio marcar dos goles.

Este tipo de partidos, donde apenas se llega con peligro a las áreas y el Cádiz CF tine más o menos controlado al rival, casi siempre se acababan ganando el año pasado. Mal asunto es que esta temporada se tornen esquivos los favores de la fortuna, porque ni poseemos un plantel para ir a buscar la portería a tumba abierta ni los jugadores tienen la confianza necesaria para ello. Sin hacer un buen partido, no se jugó mal en Barcelona. Lo que asusta es comprobar que eso no da para ganar.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación