Boris Johnson advierte que muchas familias perderán a sus seres queridos «antes de tiempo» debido al virus

El número de infectados se disparará por encima de lo esperado, asume el primer ministro británico

Coronavirus en España en directo

El primer ministro británico Boris Johnson REUTERS

Ivannia Salazar

La tranquilidad y el moderado optimismo que hasta ahora había mantenido el primer ministro británico Boris Johnson , se ha desvanecido esta tarde en la conferencia de prensa que ha dado sobre el estado del coronavirus en el Reino Unido y las nuevas medidas que tomará el gobierno. Sus palabras no fueron nada halagüeñas: el premier aseguró que muchas familias perderán a sus seres queridos “antes de tiempo” debido al virus y que el número de infectados podría ser mucho mayor al esperado.

Debido a lo que calificó como “la mayor crisis de salud pública en una generación”, Johnson afirmó que Reino Unido está llegando a la “siguiente fase” del plan previsto para combatir el virus, ya que ahora el objetivo es “retrasar su propagación” y “minimizar el sufrimiento”, ya que la enfermedad ya está en el país y no puede ser contenida. La esperanza del Gobierno es que el pico de la enfermedad se retrase “unas semanas” para que el sistema nacional de salud (NHS) esté más preparado para manejarlo, y además espera que con la llegada de la primavera y por consiguiente el aumento de las temperaturas haya “más camas disponibles”, en referencia a que habrá probablemente menos personas ingresadas que durante el invierno, cuando hay un aumento de otras dolencias.

El ejecutivo británico calcula que Reino Unido está “unas cuatro semanas” por detrás de Italia, el país europeo más afectado hasta el momento, donde han fallecido más de mil personas. La promesa del premier de que “haremos todo lo posible para ayudaros a vosotros y a vuestras familias” va dirigida sobre todo a las personas mayores, que calificó como las “más vulnerables”.

Además, explicó que “es vital lavarse las manos” y acabó diciendo, antes de ceder la palabra a los expertos, que “el país superará esto, tal como lo ha hecho en otras situaciones”.

Johnson estuvo acompañado en la rueda de prensa por Chris Whitty, el principal asesor médico del gobierno, quien enfatizó la importancia del lavado de manos y recomendó que las personas que tienen tos o fiebre se queden en casa durante al menos siete días, ya que esto reduce el riesgo para las personas mayores y las aquellas que tengan otros problemas de salud y estén más sensibles. La recomendación de siete días es porque, al parecer, la enfermedad es más infecciosa al principio. Además, el solo hecho de quedarse en casa puede retrasar significativamente el pico de la enfermedad. En todo caso, dejó claro que las personas con síntomas leves pueden transmitir la enfermedad a mucha gente.

Con respecto a los test, dijo que llegados a este punto “el gobierno no necesita identificar cada caso concreto” y quienes se queden en casa no necesitarán pruebas, sino que estas se realizarán a los casos más graves o a quienes sean hospitalizados con síntomas.

Whitty hizo un adelanto de lo que será la siguiente fase, como la introducción de medidas de “de distanciamiento social” para las personas más vulnerables, pero avisó que las consecuencias de esto, como la soledad, hacen que sea “demasiado pronto” para ponerlas en marcha.

Para el asesor médico, hay dos objetivos principales: retrasar el pico de la enfermedad y aumentar la capacidad de respuesta del NHS.

En la misma línea se manifestó El asesor científico del Gobierno, Patrick Vallance, detalló que si las personas con sóintomas se quedan en casa “habrá una reducción del 20 al 25% en el pico” y que aislar a los ancianos “puede reducir la tasa de mortalidad en aproximadamente un 30%”.

De momento las escuelas permanecerán abiertas, ya que, según Wallace, su cierre “tiene grandes repercusiones para toda la sociedad”.

Ante las preguntas de los periodistas, Johnson manifestó que las decisiones que está tomando su gobierno están basadas en “la ciencia” y el conocimiento actual sobre el virus y que se espera que el pico de la enfermedad pueda retrasarse hasta un período de “entre 10 y 14 semanas”.

Tanto el premier como los expertos se negaron a dar un número de infectados en Reino Unido ya que el dato “no se conoce con certeza” y apuntaron a que calculan que virus provocará una mortalidad de aproximadamente un 1% en la nación.

.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación