BioNTech rechaza la liberación de las patentes que propone Biden
«Los expertos señalan que la instalación y la validación de nuevos centros de producción toman como mínimo un año», indican desde el laboratorio
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El laboratorio alemán BioNTech , con sede en Maguncia, defiende que la protección de las patentes de las vacunas no limita la producción de dosis ni está detrás de las dificultades que han ralentizado las campañas de vacunación en diversos países del mundo. «Las patentes no son el factor limitante para la producción o el suministro de nuestra vacuna. Su liberación no incrementaría la producción global ni el suministro de las dosis a corto y medio plazo», ha dicho la empresa a través de un portavoz, rechazando así la propuesta formulada por el presidente de Estados Unidos, Joe Biden.
BioNTech advierte además que, de liberarse las patentes, el producto dejaría de estar sometido al necesario control por parte de las autoridades sanitarias . «Si alguno de los requisitos establecidos en su fabricación no se cumple, la calidad, la seguridad y la eficacia de la vacuna no serán ya garantizados por el fabricante ni por el inventor , lo que pondría en serio riesgo la salud de los vacunados», explica el portavoz, que también expresa cierta alarma ante la posibilidad de que «si algunas de las importantes y escasas materias primas necesarias para fabricar las vacunas no son utilizadas de la mejor manera, terminarán produciéndose menos vacunas».
Pfizer ha invertido 1.700 millones de capital privado en el programa de investigación que dio como fruto la primera de las vacunas, mientras que BioNTech, el laboratorio con el que se asoció, ha recibido una ayuda pública alemana de 375 millones de euros y un préstamo de 100 millones de euros del Banco Europeo de Inversiones . «Básicamente, les di un cheque en blanco a los investigadores para que se ocupasen solamente del desafío científico», ha descrito la inversión el presidente de Pfizer, Albert Bourla, al frente de una multinacional con más de 80.000 empleados a los que se suman los cerca de 1.500 de BioNTech.
La germana facturó en 2019 un total de 109 millones de euros, 431 millones en 2020 y espera alcanzar una facturación de 5.000 millones este año , el de pico de ventas de la vacuna, con un beneficio anual estimado de más de 3.000 millones de euros. En cuanto a Pfizer, su beneficio el año pasado superó los 14.000 millones y espera este año superar los 16.000 millones gracias entre otros factores a la gran capacidad desarrollada para la producción de vacunas, que ha llevado su tiempo y otros productores tardarían también en implementar.
« Los expertos señalan que la instalación y la validación de nuevos centros de producción toman como mínimo un año» , sigue el portavoz de BionTech, que apunta también a que la tecnología de ARN mensajero en la que se basa su vacuna «es un proceso muy complejo , desarrollado durante más de una década y que debe respetar escrupulosamente todas las etapas definidas, ejecutarlas de manera precisa por personal experimentado y entrenado para ello», además de la colaboración de no menos de 15 socios, entre ellos Merck, Novartis, Sanofi y Baxter.
BioNTech cuenta en su planteamiento con el apoyo del Gobierno alemán, que no considera que la liberación de las patentes de las vacunas contra el coronavirus sea una fórmula efectiva para acelerar la lucha contra la pandemia en todo el mundo. «La protección de la propiedad intelectual es una fuente de innovación y debe ser protegida», se ha posicionado una portavoz del Gobierno alemán. «Los verdaderos factores que limitan la producción de vacunas son la capacidad de producción y los altos estándares de calidad requeridos, no las patentes», añadió, advirtiendo que «la sugerencia de Estados Unidos de suspender las patentes de vacunas contra el covid-19 tiene importantes implicaciones para la producción de vacunas como un todo».
El Gobierno Merkel se distanciaba así definitivamente de la propuesta de Joe Biden , después de que el ministro de Exteriores alemán, Heiko Maas, hubiese expresado su propio escepticismo durante una conversación con la Asociación de la Prensa extranjera de Berlín. «Naturalmente tenemos que hablar de ello porque hay que examinar todas las salidas posibles en la situación en que nos encontramos. Pero necesitamos soluciones rápidas y no creo que esa sea una solución rápida », dijo Maas, «la prioridad debe ser aumentar las capacidades de producción ya existentes», agregó.
En opinión de Maas, n o tendría sentido liberar las patentes para ponerlas en manos de empresas que le dan prioridad al ánimo de lucro. También el ministro de Cooperación Gerd Müller se ha mostrado contario y ha declarado que «si supiera que la liberación de las patentes aceleraría la vacunación en el mundo estaría de acuerdo pero eso no es así», además de insistir en que el camino para que las vacunas lleguen a todas partes pasa por la iniciativa Covax. La ministra de Educación e Investigación, Anja Karliczeck, ha recordado por su parte que el gobierno alemán ha abierto un fondo especial para la investigación y producción de vacunas, con 750 millones de euros, a los que pueden optar también otras empresas.
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