El presidente del Gobierno anunció ayer al término de la III Cumbre Hispano Polaca que a partir del 1 de mayo España abrirá sus fronteras a los trabajadores de los países del Este que ingresaron en la Unión Europea en 2004. De hecho, España y Portugal anunciarán hoy, durante un Consejo de Empleo en Bruselas, la supresión de los obstáculos que aplican a la entrada de trabajadores procedentes de doce de los países que accedieron a la UE en 2004. En un Consejo de Empleo, al que asistirán en representación de España el ministro Jesús Caldera y el conseller catalán Josep María Rañé, los ministros hablarán de los periodos transitorios que la mayoría de los Quince países que formaban la UE antes de la última ampliación impuso a los nuevos Estados miembros.