«Hoy es difícil encontrar la ingenuidad de una geisha»
La estrella china trastornó a los japoneses al aceptar protagonizar 'Memorias de una geisha'
Actualizado: GuardarEs la gran estrella femenina de China, pero su último papel ha levantado una agria polémica en Japón, al dar vida una geisha. Auténtico ídolo en Oriente desde que triunfó con Tigre y dragón, Zhang Ziyi habla inglés y da vida a una mujer desde los 15 a los 35 años en Memorias de una geisha, best-seller de Arthur Golden que Rob Marshall, el artífice del Chicago cinematográfico, ha llevado a la gran pantalla con Steven Spielberg como productor.
Musa de Zhang Yimou, con quien debutó en Camino a casa y en quien también confió en Hero y La casa de las dagas voladoras, Ziyi asegura que no le preocupa la polémica, que sólo le interesa hacer bien su trabajo. Opina que el público se dará cuenta de su esfuerzo para dar vida a la perfecta Sayuri, que tiene como rival a la geisha Hatsumomo, rol que interpreta su compatriota Gong Li, la otra actriz idolatrada en el Lejano Oriente.
-¿Menuda controversia! Los japoneses no están muy contentos porque querían que el papel fuera para una actriz nipona.
-Estamos hablando de un universo misterioso y exótico. La polémica que se ha desatado en China ha sido porque, en el fondo, nos fascinan las geishas. No sabemos nada de su mundo, y eso lo hace aún más interesante. Es como cuando una persona te oculta algo y entonces tú quieres saber todo de ella.
-Comparte protagonismo con Gong Li, su ídolo de siempre, cuyo personaje se porta de manera muy cruel con el suyo.
-Me dio mucha pena la pequeña actriz japonesa que me interpreta en la infancia, ella tuvo que sufrirla mucho más que yo. Desde que era adolescente soy fan de Gong Li, he crecido viendo sus películas y creo que es la mejor actriz china. En la película no tenemos muchas escenas juntas, es una pena. Recuerdo especialmente una de las secuencias que compartíamos y en la que había mucho fuego. Ese día estaba muy excitada, la escena salió rápido y bien. No hubo necesidad de que habláramos mucho, había química entre nosotras. En otro momento que su personaje me tiene que pegar, le dije que lo hiciera de verdad, y me pegó un bofetón que no se me va a olvidar porque su mano se quedó en mi cara. Lo pasamos bien juntas y espero que volvamos pronto a coincidir.
-¿Qué le llamó la atención de Rob Marshall?
-Es un genio. Ensayamos mucho, preparamos cada escena a conciencia. Tenía una visión muy clara de lo que quería y fue muy paciente con todos nosotros. Ha sido un rodaje muy duro, porque necesitábamos muchos interpretes de muchas nacionalidades. Rob fue muy paciente, no paró de animarnos. En mi caso, el lenguaje no fue una barrera.
Perseverante
-Empieza a dar vida a su personaje cuando sólo tiene dieciséis años.
-Lo más importante de mi interpretación está en los ojos. De joven, mostré la inocencia a través de ellos, pero la mirada va cambiando con el tiempo porque en las ultimas escenas está cerca de los cincuenta años.
-¿Cómo es Sayuri?
-Una mujer con una dolorosa infancia que está sola y no tiene poder de decisión. Ella es la única persona que puede ayudarse a sí misma. A veces me confunde porque actúa de manera contradictoria, pero sólo es una mujer sencilla que, aunque le tratan muy mal, cree en el ser humano. En estos tiempos, es muy difícil encontrar su ingenuidad.
-Sayuri es la mujer más bella de Kyoto.
-La belleza nace de dentro. Tienes que ser tu mismo, tener seguridad, ser independiente La gente se siente atraída por esto, no por la imagen que tengas. Para mí, una persona es bella cuando tiene un gran corazón y es amable.
- Entonces, ¿es usted independiente y está segura de sí misma?
-Sí. Como Sayuri, aprendí desde mi infancia que si eres tenaz y perseveras en lo que quieres, puedes conseguir el triunfo.
-De todo lo que han dicho sobre Memorias de una geisha, ¿qué es lo que más le ha molestado?
-Cuando me ofrecieron el papel pensé que me iban a exigir mucho, que tenía que darlo todo, y así lo he hecho. Es un personaje fantástico, cualquier actriz de cualquier país hubiera dado todo por ser Sayuri. Yo he tratado de ser la mejor.
-Las geishas no son libres para amar a quien quieran.
-Eso es lo único que no me gusta de Sayuri. Si yo amo a alguien, se lo voy a decir.
-Ahora rueda en China un drama histórico, El banquete, basada en el Hamlet de Shakespeare.
-Estoy trabajando en mi lengua, lo que es mucho más fácil. Interpreto a una emperatriz joven. Es una historia complicada, pero muy interesante.
-Su nombre suena para el Oscar.
-Estos premios son cada vez más populares en China porque, desde Tigre y Dragón, cada año hay una película de mi país nominada.