Dani Pedrosa está ante una ocasión perfecta para posicionarse en clara ventaja respecto a sus adversarios y ser el gran favorito para proclamarse campeón del mundo de MotoGP de 2013. El catalán, que empezó dubitativo la temporada, ha ido creciendo enteros hasta llegar líder a Barcelona y marcar una pole gigantesca, aventajando a sus rivales en más de medio segundo y dando una sensación portentosa de tenerlo todo bajo control.
El sistema de calificación apenas permite más lecturas que el hecho en sí de rodar al límite y tratar de poner la moto en la posición más adelantada posible. Si a lo largo del fin de semana habían sido las Yamaha la rueda a seguir, el sábado fue el turno de la HRC de Dani Pedrosa, que rebajó los registros históricos para marcar un tiempo escandaloso, muy por delante de Cal Crutchlow, segundo, y Jorge Lorenzo, que completa la primera línea para la carrera del domingo.
El mallorquín comenzó la calificación con un problema en el embrague, estando obligado a cambiar su montura por la segunda M1. El actual campeón apenas perdió una vuelta en el intento, pero sus prestaciones no fueron tan rotundas como el viernes. No sólo fue superado por Pedrosa, sino que Crutchlow y su Tech3 le quitaron la segunda posición in extremis
Mucho peor le fueron las cosas a Márquez, a quien Montmeló le está costando mucho con la 1.000. Marc trató por todos los medios de vivir más cerca de la cabeza, pero se tuvo que conformar con cerrar la segunda línea.
Ni siquiera eso logró Valentino Rossi, decepcionante tras un gran viernes. 'Il Dottore' hizo el séptimo mejor tiempo, lejísimos de su compañero de garaje una vez más y certificando que, salvo milagro en forma de lluvia a lo largo del campeonato, será muy difícil volver a verlo en lo más alto del cajón.
Una vez más, la CRT de Aleix Espargaró fue la más rápida.
