La localidad texana de Austin será un fortín propio de 'Fort Knox' durante todo el fin de semana. El atentado por dos bombas en el maratón de Boston el pasado lunes ha provocado que las medidas de seguridad en el circuito se hayan visto incrementadas. Desde la dirección de carrera han querido hacer un llamamiento a la calma, demostrando que están preparados para neutralizar cualquier ataque terrorista. «Nuestras medidas son de por sí muy fuertes. Serán las mismas que en el pasado gran premio de Fórmula 1, pero aumentadas», explicó este jueves Julie Loignon, responsable de Relaciones Públicas del trazado.
Los dueños del GP de las Américas doblarán sus esfuerzos para garantizar la seguridad de todas aquellas familias que quieran pasar unos días puramente deportivos. Los responsables comunicaron que se grabará a todos los espectadores que accedan al circuito, uno a uno, así como que habrá un aumento más minucioso de los registros en mochilas y bolsas. No se permitirá la entrada de numerosos objetos: desde aquellos fabricados con material que puedan ser usados como arma (cristal y metales), hasta la prohibición de introducir bebidas alcohólicas. Incluso los paraguas serán medidos y solo dejaran pasar los que tengan unas dimensiones pequeñas. Se espera un total de 100.000 personas como testigos directos de las carreras, por lo que el incremento en el efectivo de policía estatal y guardias privados ha sido obligatorio.
Al temor por los atentados en el estado de Massachusetts se une la tragedia vivida este jueves en Texas, con la explosión en la población de Waco de una fábrica química que ha dejado varios muertos y más de 150 heridos. Tanto por este último suceso como por las bombas en la carrera de Boston, durante el fin de semana se realizarán en Austin varios homenajes a los damnificados. Este jueves las banderas ya ondeaban a media asta en todo el circuito y durante la carrera del domingo se prevé un minuto de silencio por las víctimas.