Márquez será campeón en Australia si:
La primera tentativa de Marc Márquez para proclamarse campeón del mundo contó con un preludio no apto para corazones taquicárdicos. Bridgestone (igual que Dunlop en Moto2) falló en el intento de conseguir unos neumátios adecuados al reasfaltado circuito de Phillip Island, dejando por delante una carrera ‘flag to flag’ (bandera a bandera). O lo que es lo mismo, pase lo que pase se disputan todas las vueltas, 26 en este caso, y el peligro de explosión en las ruedas les obliga, sin excepción, a parar entre las vueltas 12 y 14 para cambiarlas. Un carrusel de entradas y salidas en el ‘pit lane’ que rara vez se ve en condiciones de agua y que es una absoluta novedad con el trazado completamente seco. La posible solución pasaba por un neumático extra duro, que contó con la desaprobación unánime de los pilotos por deslizar demasiado y porque se quebraba con riesgos parecidos al duro.
Para no variar el guion, las opiniones de Márquez y Lorenzo no podían ser más contrapuestas. El primero deseaba ante todo que no lo mareasen más, y apostaba por una sola carrera a 14 vueltas. Jorge deseaba hacer dos mangas, como en Superbikes, pero por nada del mundo quería una decisión como la que se tomó. «Con un neumático liso, que está con el brillo en la primera vuelta, es muy peligroso si no quieres perder ni medio segundo. Empiezas a tirar, intentas inclinar al máximo y, con el neumático limpio y con ese brillo, te caes muy fácilmente. Otro problema es la entrada en pista, que es muy estrecha y va directamente en la trazada buena de cuando vas en vuelta lanzada y sería un peligro pues si hay tres vueltas y entras en la misma no pasa nada, pero si lo haces en la vuelta lanzada de otro piloto sales desde boxes en medio de la trazada» dijo el mallorquín. Argumentos que contrastan con los del genio de Cervera, mucho más conciso: «Lo suyo es un ‘flag to flag’, que para eso tenemos dos motos», lanzó con aparente despreocupación.
La medida sí preocupaba en otros garajes, como el de Aleix Espargaró, en uno de los casos más evidentes en los que la falta de presupuesto no permite disponer de dos motos idénticas, con el consiguiente perjuicio. Antes, en la clasificación, Lorenzo le había puesto ‘alas’ a su Yamaha, en el último intento desesperado por convertirla en una Honda. El motivo no fue otro que un susto monumental al llevarse por delante una gaviota que se quedó incrustada en el carenado de la M1. Pese a todo, y gracias al enorme agarre del trazado australiano, consiguió un registro bestial, aniquilando la plusmarca de Casey Stoner, nuevo integrante del ‘Salón de la fama’ de MotoGP.
Rossi, que ya observa las cosas con cierta distancia, respondió con indiferencia a las posibles soluciones de cara a la carrera. Salir tercero y por delante de Pedrosa ya le suponía un logro casi inédito en lo que va de año, muy lejos de una cabeza en la que Márquez necesita siete puntos sobre Lorenzo para llevarse un Mundial de bandera.
La misma incertidumbre sobre el estado de los neumáticos ya había aparecido el viernes en Moto2, donde los elogios al ‘nuevo’ Phillip Island pronto se transformaron en crítica a su excesiva abrasión. Con la noticia digerida, y con una carrera apenas a trece vueltas preparada para el domingo, dos fueron las noticias. Primero, la buena, el séptimo puesto en parrilla de Ana Carrasco, que tras convertirse en la primera española en puntuar en un Mundial ahora ya busca otras cotas. La mala, la más importante, la caída de Scott Redding, que con una muñeca fracturada se perderá el Gran Premio, puede que también Motegi y quién sabe si ha volado el título para él. La categoría intermedia acostumbra a brindarnos momentos de emoción, y con la lesión de Redding las posibilidades de que el campeonato llegue ‘vivo’ a Cheste son altas, sobre todo si corre en Japón, algo que parece un hecho en Moto3, donde Luis Salom intenta sacar la cabeza dentro de una igualdad con Rins y Viñales que ha deparado un Mundial inolvidable.
-Una carrera ‘flag to flag’ como la de este domingo en Australia es el escenario donde Marc Márquez plantea proclamarse campeón del Mundo de MotoGP.