La vicepresidenta primera del Gobierno español, María Teresa Fernández de la Vega, subrayó ayer que el nuevo Consejo de Derechos Humanos debe ser el instrumento que canalice nuevas ideas y mejore los logros ya alcanzados en esa materia. De la Vega, que participó en la inauguración del nuevo CDH, consideró que ese órgano «será capaz de avanzar en lo concreto actuando donde resulte necesario» y abogó por que el Consejo «no debe contentarse con mantener los logros» de la extinta Comisión de Derechos Humanos a la que sustituye, sino «ser capaz de mejorarlos». De la Vega anunció que España ha presentado su candidatura para ser miembro del CDH de la ONU a partir de 2008. «Tenemos las condiciones objetivas para ostentar ese puesto, primero por la posición como país donante y promotor de los derechos humanos y también como líderes en el proceso de reformas emprendidas».