Un hombre con explosivos en el zapato furioso con un imán chií que criticó a Al Zarqaui se hizo saltar por los aires en una de las mezquitas más importantes de Bagdad durante la oración de los viernes, terminando con la vida de 13 personas e hiriendo a cerca de 30. La mezquita de Buratha ya fue el blanco de un triple atentado suicida el 7 de abril, que se saldó con 90 muertos y 175 heridos.

Asimismo, otras seis fallecieron, entre ellas un responsable suní, y 16 resultaron heridas en varios ataques y tiroteos. En el norte de la capital, tres civiles perdieron la vida en un bombardeo con proyectiles de mortero. Y pistoleros tirotearon y mataron al presidente de la Comisión de Ulemas Musulmanes del sur, el jeque Yusef Yaqub al Hasan y a dos de sus acompañantes.