Antonio Muñoz está tranquilo, y con su mensaje espera acabar con el nerviosismo que pueda existir en la afición por la falta de fichajes. Sólo hacen falta pequeños retoques, eso sí de lujo, para completar una plantilla «que es la envidia de los demás clubes de Segunda». Todas sus palabras están impregnadas de mesura y prudencia, como si no quisiera excederse en sus declaraciones, buscando el término medio entre la euforia y el pesimismo. En el inicio de una nueva campaña de abonados, el presidente repasa la actualidad cadista y desea cerrar cuanto antes las incorporaciones necesarias para que Oli pueda trabajar a gusto . Por supuesto, sigue sin decir un solo nombre.