Para 2010. Esa es la fecha límite que se pone el Ayuntamiento en su calendario de trabajo para hacer completamente peatonal el centro histórico de la ciudad. El proyecto, que ya se ha iniciado con los trabajos del entorno del mercado de abastos, constará en total de siete fases y tendrá un presupuesto inicial de unos nueve millones de euros.
Estas son las claves del Plan de Urbanismo Comercial en el que, desde hace unos años, viene trabajando el área de Fomento en un intento de revitalizar, salvar y activar la vida del comercio del centro de El Puerto, deteriorado ante la proliferación de los periféricos centros comerciales, el déficit de aparcamientos, la ausencia de franquicias de peso.
Las principales calles que el primer borrador del Plan planea peatonalizar totalmente serían las siguientes: la calle Pagador, desde Santo Domingo hasta la Plaza de España, (su tramo primero con Federico Rubio queda pendiente o no como desvío de circulación hacía Bajamar), también la Plaza de España, donde se ubica la Iglesia Mayor Prioral, Palacios hasta Misericordia, San Bartolomé (en su último tramo hacía La Placilla), y, todo el entorno del mercado de abastos obras que, en parte, ya se han ejecutado.
Calle Larga
Además, se ampliará la peatonalización de la calle Luna, desde la plaza Juan Gavala hasta Las Galeras y, muy importante, se suprimiría la circulación en la calle Larga (una de las principales vías del municipio), de Palacios a Ricardo Alcón, limitando los accesos desde la plaza Peral hacía Pozos Dulces. Tampoco se permitiría la circulación en la plaza de la Herrería y Jesús de los Milagros en su linde con el Castillo de San Marcos.
En las vías «completamente peatonales» sólo tendrán opción de circular los vehículos de emergencia (bomberos, ambulancia, Policía) y los de los servicios municipales. Pero además, habrá otras calles en los que se impondrá el «acceso restringido». En ellas, se permitirá el paso para carga y descarga de 7 a 10 de la mañana pero, fuera de este horario, sólo podrán acceder a la zona vehículos con garaje privado, discapacitados y municipales. Todos ellos deberán portar un mando para subir una pilona que se pondrá para evitar el paso de otros coches.
Estas calles con acceso restringido son, según el borrador, Vicario, desde Plaza de España hasta Ganado o Santa Clara (aún no definido), Nevería, desde algo antes de su intersección con Palacios hasta Ganado, el entorno de la plaza Peral y el trayecto de Luna que va de Las Galeras a Misericordia.
En cuanto a los aparcamientos, además de los de Plaza Peral, Ganado, Pozos Dulces, Plaza de Toros y Bajamar, tan sólo se proyecta uno nuevo en la Plaza del actual Ayuntamiento. Aún así el plan habla de la creación de nuevos estacionamientos en la periferia de la zona peatonal y de la construcción de otros garajes subterráneos en el mismo centro. También, se prevé el cambio de dirección de algunas calles importantes y del impulso que necesita el transporte público en el municipio.
Se pretender contar con paradas y autobuses estratégicos que ayuden a aliviar el denso tráfico que se podrá originar una vez quede cerrado a la circulación el casco histórico.