Agentes del Cuerpo Nacional de Policía de Albacete detuvieron ayer domingo a Juan Carlos Galdón López, el hombre de 35 años que en la madrugada del pasado viernes acabó a tiros con la vida del hijo de su compañera sentimental, de tan sólo siete años de edad, e hirió de gravedad a ésta en el piso que compartían en el número ocho de la calle de Palencia, en la capital manchega.
La detención de Juan Carlos Galdón era la noticia más esperada por los familiares de su actual compañera sentimental, Julia Navarro Reolid, de 28 años, que el sábado tuvieron que vivir uno de los peores momentos de su vida al enterrar al pequeño Óscar mientras su madre permanecía en estado grave en la Unidad de Cuidados Críticos del Hospital General Universitario de Albacete, con cuatro impactos de bala en la espalda.
Juan Carlos se encontraba huido desde que en la madrugada del viernes descerrajó cuatro tiros a su novia y tres al hijo de ésta, uno de los cuales impactó mortalmente en su cabeza mientras su madre trataba de protegerlo.
Colaboración ciudadana
Fue entonces cuando emprendió la huida a bordo de un vehículo de color granate, datos que el propio delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha, Máximo Díaz-Cano, se encargó de difundir públicamente en una rueda de prensa convocada en Albacete horas después del crimen con el fin de pedir la colaboración ciudadana para dar con el paradero del agresor.
Fue precisamente este coche el que delató la presencia de Juan Carlos en una parcela propiedad de un carnicero albaceteño que este fin de semana no había acudido a esta casa y que, según dijo, desconocía que el hombre más buscado de España se hubiera colado en su finca para esconderse. Los agentes de la policía consiguieron después el oportuno mandamiento judicial para acceder a la finca donde Juan Carlos Galdón «no ha opuesto resistencia, y se le ha encontrado también el arma con el que hizo los disparos, que le ha sido intervenida», confirmó ayer el subdelegado del Gobierno en Albacete, José Herrero Arcas.
El arma, un rifle del calibre 22, aún tenía una bala en la recámara. Una vez que el detenido fue conducido a la Comisaría de Albacete para ser interrogado y puesto a disposición judicial, se levantaron los servicios especiales de protección que las fuerzas de seguridad habían establecido en el hospital para evitar que Juan Carlos se acercara a Julia y al entorno de su anterior compañera sentimental, ya que las dos mujeres lo habían denunciado en el pasado por malos tratos, logrando órdenes de alejamiento temporal.