Polémica por un supuesto insulto de Boris Johnson a la ministra principal de Escocia

« Esa maldita Wee Jimmy Krankie ». Ese es el supuesto insulto que lanzó el primer ministro británico, Boris Johnson , contra la ministra principal de Escocia, Nicola Sturgeon , durante una reunión privada en Downing Street en la que se estaba tratando el tema de la cumbre del clima, COP26, que se celebrará este año en Glasglow. Wee Jimmy Krankie es un personaje de la comedia escocesa de la década de los 80 «The Krankies», con la que muchas veces y a modo de burla se ha comparado a Sturgeon.

Según los medios británicos que han publicado la filtración del insulto, cuando la exparlamentaria del Partido Conservador Claire Perry O’Neill le sugirió a Johnson ofrecerle a Sturgeon un papel destacado en la Cumbre, el «premier» habría explotado con furia diciendo que eso sucedería « sobre mi puto cadáver » y que «a mí no me va a echar de Escocia esa maldita Wee Jimmy Krankie ». El testigo declaró que la reacción de Johnson «fue sorprendente» y «no la esperada» para tratar el tema de Sturgeon.

La idea de O’Neill, que además fue despedida el día del Brexit y vía telefónica como presidenta de la conferencia por la mano derecha de Johnson, su asesor Dominic Cummings, tenía como objetivo limar asperezas de cara al evento con el Partido Nacionalista Escocés. En declaraciones a la BBC, O’Neill se limitó a señalar que cuando sugirió «que Nicola Sturgeon tuviera un papel» (en la COP26), «el primer ministro lo refutó de buena gana».

Sin embargo, un portavoz del Gobierno negó que el primer ministro hubiera hecho ese comentario sobre la líder escocesa, mientras que otra fuente supuestamente presente en la reunión reconoció que Johnson manifestó su « fuerte punto de vista sobre el papel oficial de la ministra principal» con un vocabulario inapropiado.

Pero esta no es la única polémica que rodea a la cumbre. El primer varapalo que se llevó Johnson fue la negativa del ex primer ministro David Cameron a su propuesta para encabezarla. Cameron declaró a los medios que « fue un honor que me pidieran presidir esta importante conferencia y fue muy amable por parte del Primer Ministro considerarme, pero estas cosas las hace mejor un ministro del Gobierno».