El torso de la exnovia del rey del cachopo tenía arrancada la piel
Los forenses piensan que el homicida pudo ocultar así la cesárea practicada a Heidi
![César Ramón Viruete](https://s1.abcstatics.com/media/espana/2021/05/25/cachopo-kMD--1248x698@abc.jpg)
Las dos incisiones que presentaba el torso de Heidi Paz Bulnes, de 15 y 2 centímetros, apuntan a que el homicida extrajo piel a la altura del ombligo para eliminar posiblemente una cicatriz de una cesárea con la finalidad de dificultar su identificación.
La Audiencia Provincial retomó ayer el juicio que se celebra contra César Román Viruete, el ‘rey del cachopo’, por el homicidio de su pareja. El empresario se enfrenta a una petición fiscal de quince años de cárcel por un delito de homicidio y otro de profanación de cadáver , mientras la familia lo eleva a veinticinco años de prisión, informa Ep.
Tras concluir la fase testifical, la Sala ha arrancado con la prueba pericial, clave para determinar si el torso hallado en una maleta calcinada encontrada en una nave que tenía alquilada el acusado correspondía al de la joven hondureña, frente a la tesis de la defensa de que podría estar con vida y oculta en una posible organización criminal.
Dos de los médicos forenses que comparecieron indicaron que apreciaron en un primer examen externo dos incisiones en el tronco y reconocieron que ello dificulta apreciar las cicatrices de una cesárea que se le practicó a la muchacha en uno de sus dos partos. «Puede haber cicatriz y que se haga invisible. Cabe esa posibilidad que exista pero que no se vea. Había zonas en el torso donde faltaba piel. Hay cortes en la piel. Si hubiera estado ahí la cicatriz, habría desaparecido», recalcaron.
De ahí que crean que esos cortes se realizaron a la altura del ombligo para que no se pudiera identificar a la víctima. «Es un corte para quitar algo. No es una lesión hecha en vida . Es retirada de parte superficial y está perfectamente marcada y delimitada», detallaron.
Al cuerpo se le amputaron las extremidades, la cabeza y los senos. Todo ello con cortes regulares realizados a través de las articulaciones y no en la zona ósea, lo que indica que el homicida sabía cómo hacerlo. Según los expertos, las incisiones se pudieron hacer con un cuchillo y no con una sierra, dado que no había marcas dentales. Los investigadores localizaron al lado de la maleta un cuchillo con restos de sosa cáustica y otro en el local del rey del cachopo situado en la calle de Caunedo.
Noticias relacionadas