Madrid desmiente a los satélites europeos y asegura que las emisiones de metano en Valdemingómez son residuales
Las mediciones del Ayuntamiento de este verano no coinciden con los datos difundidos por la Agencia Espacial Europea
El Ayuntamiento de Madrid se revuelve contra las conclusiones de los satélites europeos . Contra el informe del equipo de científicos de GHGSat y del Instituto Holandés de Investigación Espacial SRON que señala como culpables de la ‘mancha’ de metano más grande de Europa a los vertederos de Valdemingómez y Pinto . Del primero, al sur de la capital y el más grande de la región, brotó en agosto un pico de hasta 5.000 kilos por hora del gas. Desde el Consistorio, no obstante, rebaten estos resultados con sus propias mediciones y afirman que durante los meses de abril, mayo y julio las emisiones de biogás (compuesto por metano y dióxido de carbono) fueron residuales.
El Ayuntamiento ha lanzado el comunicado dos días después de que la Agencia Espacial Europea (ESA, por sus siglas en inglés) difundiera el estudio que arrancó el pasado verano, cuando la misión Sentinel-5P, el satélite de observación terrestre del programa europeo Copérnico, identificó grandes fuentes de metano a 18 kilómetros de Madrid. El grupo de científicos afincado en Italia emprendió el seguimiento de estos dos puntos rojos que, entre el 20 de agosto y el 13 de octubre, llegaron a expulsar 8.800 kilos por hora de metano , la mayor cantidad detectada hasta la fecha por GHGSat. Esta empresa, que se dedica a radiografiar el planeta en busca de concentraciones de gases de efecto invernadero, facilitó a ABC las coordenadas exactas de las emisiones madrileñas: el Centro de Tratamiento de Las Dehesas, dentro del Parque Tecnológico de Valdemingómez, y el depósito de Pinto.
Los datos, sin embargo, desconciertan a los técnicos del Ayuntamiento de Madrid, según fuentes municipales, ya que la planta de Las Dehesas está clausurada y dispone de sistemas de sellado y desgasificación del biogás. En Cibeles insisten en que los satélites, a cientos de kilómetros de altura, no son capaces de determinar el origen exacto de las emisiones y, tras mantener una reunión con la ESA y GHGSat, han solicitado su metodología para contrastar el informe europeo con los estudios de analizadores terrestres y drones madrileños. En cualquier caso, los técnicos volverán a Valdemingómez en los próximos días para una nueva revisión.
Noticias relacionadas