Elecciones 12-J
El PSOE de Pontevedra abre la caja de los truenos a Gonzalo Caballero
Reprochan errores ante el 12-J que dilapidaron su «buena posición» y reclaman «recomponer el modelo» del partido
«Se han cometido errores durante la precampaña y la campaña ». La frase, pronunciada ayer en rueda de prensa por el secretario general del PSOE en Pontevedra, David Regades, sonó a declaración de intenciones. Como informó ABC esta semana, el batacazo electoral de los socialistas el 12-J anticipa el final de la paz interna de la que ha gozado hasta ahora Gonzalo Caballero . «Hubo errores que tenemos que corregir». «Toca recomponer el modelo político del partido». «No habrá alternativa al PP si el PSOE no es un partido fuerte». Estas contundentes declaraciones de Regades, que ayer reunió a su ejecutiva para analizar lo sucedido el pasado domingo, contrastan con la tibieza de la víspera de Caballero, quien más allá de afirmar que no iba a soltar el «timón» apuntaba a transmitir mejor el perfil «galeguista» del PSdeG y abrirse a la sociedad, con más bien poca autocrítica.
Regades demandó una «reflexión profunda» en el seno del partido, que se quedó el 12-J «muy lejos del objetivo marcado», con un «mal resultado». Una claridad que choca con los términos que utiliza Caballero, quien prefiere hablar de «avance que no es satisfactorio». Donde el secretario general recuerda que solo una vez gobernaron en Galicia a través de las urnas, el responsable provincial apela a la «vocación de ser primera fuerza». Si el primero se escuda en que el Covid cortó la «ola» positiva, el segundo lamenta que no sirvió de mucho llegar con el «impulso» de las elecciones de 2019 y el consiguiente músculo en municipios y Diputaciones. « Salimos de una muy buena posición », hizo hincapié Regades.
Barriendo para casa, apuntó que «con el resultado de la provincia de Pontevedra», que aporta el 40% de diputados del PSdeG en toda Galicia, «hoy Feijóo no sería presidente de la Xunta». «El modelo de éxito es el modelo de la provincia de Pontevedra», ahondó. Y puso sobre la mesa un nombre: el de Carmela Silva, presidenta de la Diputación de Pontevedra, a quien tildó de «referente» .
Evasivas
Mucho menos claro fue Regades cuando, en el turno de preguntas, se le inquirió por el propio Caballero. «No sobra nadie», comentó, aunque matizó que «no creo que sea yo el que tenga que decirlo». Al contrario, llamó a «ver qué es lo que quiere la militancia». Ante cada cuestión directa sobre Caballero, recordó lo «malo» que fue el resultado, se remitió al caso de Pontevedra y evitó concretar si las recetas que sugería eran extrapolables al escenario autonómico. Véase cuando puso en valor el modus operandi en su provincia: «escuchamos», «no hay rivales, somos un equipo», un «partido unido» . O al apuntar: «No me vale de nada ganar dentro si no ganamos fuera». ¿Falla en todo eso Caballero? Evasivas por respuesta.
El ruido de tambores, en todo caso, ha comenzado. «Todo el mundo puede ver mejor los errores a posteriori. A toro pasado siempre es más fácil », defendió a su jefe Dolores Villarino, secretaria de Política Institucional, en declaraciones a Ep. En Twitter, el propio Caballero admitió «errores a mejorar». Está por ver si los que cometió en las elecciones del 12-J le cuestan el puesto.
Noticias relacionadas