El PSdeG intenta coser sus heridas
Caballero recibe en As Pontes el aplauso del presidente de la Diputación de La Coruña, Valentín González
![El alcalde de Vigo, Abel Caballero, abraza al regidor de As Pontes, Valentín González](https://s3.abcstatics.com/media/espana/2016/06/23/caballero-valentin-aspontes-kf4C--620x349@abc.jpg)
Valentín González Formoso convirtió el cine Alovi de As Pontes en la recreación de la «Arcadia» para tratar de hilvanar las costuras de la maltrecha « familia socialista gallega ». Y en esa apuesta por la reconciliación tuvo un lugar destacado el alcalde de Vigo, Abel Caballero , quien nada más llegar a la localidad protagonizó la foto del día al abrazar a Formoso. Esa imagen selló simbólicamente los recelos entre los dos regidores después de que el presidente de la Diputación de La Coruña contestase públicamente la gira del regidor vigués para unificar el partido la pasada primavera. Pero al margen de los antecedentes, y para tratar de hacer visibles los mantras de los dirigentes socialistas, el regidor de As Pontes se esmeró y llenó el viejo cine con encanto del pueblo. Amenizó la cita con músicas del pasado (Marisol, Formula V) y del presente ( Joaquín Sabina ) para tratar de animar a un auditorio entregado a la causa de «darle un sí al cambio y vencer a las encuestas».
La arenga de Caballero
Y al fin Caballero apareció. Nada más subir lanzó una pregunta al auditorio:«¿ Sabéis por qué estamos aquí ? Y él mismo respondió: « Por culpa de Pablo Iglesias, el Malo » y lo contrapuso a «Pablo Iglesias, el Bueno que no solo fundó el partido sino también el sindicato». El siguiente objetivo fueron las Mareas. Sin titubear enfrentó el modelo de los gobiernos socialistas en los ayuntamientos al « desastre de las mareas » e indicó que «en Barcelona, en Santiago y La Coruña duerme gente en la calle» mientras que en «Vigo construimos un albergue para que nadie duerma fuera. porque les damos derechos y dignidad». La intervención del alcalde vigués fue interrumpida con salvas de aplausos de forma constante . Caballero se creció y el público respondió. Sus compañeros tuvieron menos suerte.
El alcalde anfitrión, Valentín González, se esmeró en congraciarse con el invitado. Lo llamó « alcalde de los alcaldes de España» y calificó a Vigo de ciudad hermana. Sin embargo, a pesar de las inflexiones de voz no arrancó ningún aplauso. Valentín repitió en varias ocasiones que España necesita ser valiente, con « cabeza y corazón ». Según dijo, «el PP tiene solo cabeza», pero el presidente de la Diputación coruñesa al repetir su lema echó mano de manera inconsciente del eslogan electoral del PP en el año 2008. En aquel entonces, los populares pidieron el voto para Rajoy apelando también a la cabeza y al corazón «por reunir las cualidades principales del candidato». Para reforzar el argumentario socialista ya estaba Caballero que recordó a los « refugiados », « a la revolución de la igualdad todavía pendiente » o a la « escuela pública ». La anécdota final la puso el vigués. Se quitó la chaqueta desde el estrado por el calor, pero matizó: «Yo no me cambio la chaqueta».
A la fiesta socialista de As Pontes también se apuntó el candidato a la presidencia de la Xunta, Xoaquín Fernández Leiceaga . Fue telonero de Abel Caballero y trató de ser reconocido. «Xocas» calificó al PP como « memoria del pasado » y pronosticó que « no vamos a consentir que Rajoy sea presidente y Feijóo tampoco». Y esta vez volvió a ocuparse de Pablo Iglesias. No dudó en llamarle populista y lo tildó de « peligro » para la estabilidad institucional. Por elevación, pero de lado, criticó la gestión municipal de los rupturistas: «Lo que le importa a Pablo Iglesias es el poder, no los cambios». Y como novedad introdujo a En Marea en su relato, a la que acusó de «participar en la consigna de todo el poder para Iglesias» y remató diciendo que no respetan « a Beiras porque no se somete a Iglesias ».
Noticias relacionadas