Lugo
Cazado el kamikaze que sembró el pánico por las calles de Lugo en pleno San Valentín
El individuo ha sido localizado, detenido y ahora se enfrenta a cinco años de prisión por conducir presuntamente de manera temeraria
La noche de San Valentín no transcurría con tranquilidad para uno de los detenidos por la Policía Local lucense. Al parecer, y según relatan los agentes, alrededor de las tres y cuarto de la madrugada , un kamikaze apretó el acelerador de su Volkswagen Golf modelo «R» - con más de 300 caballos -, sembrando así el pánico en las calles de Lugo , recoge La Voz de Galicia. El hombre, de apenas 29 años de edad, se habría encontrado con una patrulla de la Policía comenzando así una persecución que duraría parte de la noche. Habría sido en ese momento cuando empezó su temeraria carrera, con acciones que terminaron por asustar a los viandantes: altas velocidades, derrapes, circulación en sentido contrario y peligro inminente de colisión con otros coches fueron protagonistas en la madrugada lucense del 14 de febrero.
El individuo no iba solo, si no que llevaba a una acompañante en el asiento del copiloto. Poniendo supuestamente en peligro la seguridad de ambos, así como la de los viandantes y la de los propios policías, el vehículo habría llegado a alcanzar los 100 kilómetros por hora . A consecuencia de la temeridad, los agentes decidieron abandonar la persecución , aunque no la investigación. Desde la noche de San Valentín se han rastreado a conciencia la placa, la marca, el modelo, el color y las características específicas del vehículo fugado. Así, lograron identificar el coche fugado , con su correspondiente conductor. Por ello, el individuo será citado para la vista oral - siguiendo el procedimiento de juicio rápido -. El acusado se enfrenta a entre dos y cinco años de prisión , además de una multa de entre 12 y 24 meses y una retirada del carnet de conducir de entre seis y diez años , explica La Voz. Todo ello, siendo investigado por un presunto delito contra la seguridad vial por conducción temeraria y con manifiesto desprecio por la vida de los demás.
La investigación se llevó a cabo gracias al rastreo informático de todas las matriculas de España, resultando solo una coincidente con el vehículo descrito por los agentes y acusado de los hechos. Ante esto, se buscó el coche y se localizó al individuo, procediendo a la posterior investigación por el supuesto delito anteriormente mencionado.
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