Feijóo se conforma con que el AVE funcione en 2021 pero duda que vaya a ser posible
El presidente exhibe una lista de 25 reclamaciones de Galicia al Gobierno mientras Ábalos insiste en que la alta velocidad avanza en los plazos previstos
A escasas horas de que comenzase la campaña electoral y desde el atril de la rueda de prensa posterior al Consello de la Xunta, el presidente gallego puso deberes al Gobierno central que salga de las urnas tras el 10-N. Alberto Núñez Feijóo exhibió una lista con las 25 principales reclamaciones de Galicia . La mayor parte —pago de la deuda, apoyo a la industria, servicios sociales o Xacobeo— ya eran conocidas. Pero en el bloque de infraestructuras, Feijóo cambió la fecha en la que exige que entre en funcionamiento el AVE entre Madrid y Galicia . Hasta ahora se manejaba 2020, pero tras constatar retrasos en las obras, que el Ministerio de Fomento niega, la Xunta pide que al menos esté listo al año siguiente. Aún así su entrada en servicio en 2021, según Feijóo, «tiene un riesgo altísimo de incumplimiento».
La batalla por la línea de alta velocidad se inició la semana pasada cuando el Consello de la Xunta aprobó un informe sobre el estado de las obras para conectar a Galicia con la meseta. «Hay un retraso de ejecución incuestionable», subrayó Feijóo. Sin embargo, el ministro de Fomento, José Luis Ábalos, insistió esta mañana en que los plazos del AVE a Galicia siguen según lo previsto . Antes de participar en el Foro ABC, Ábalos afeó a Feijóo que cuestione el cumplimiento del Gobierno con la alta velocidad. «Me cuesta entender este ejercicio de deslealtad tan innecesario porque todos estamos comprometidos con lo mismo», remarcó el ministro. También reiteró que a principios de 2020 se iniciarán las pruebas una vez finalizadas las obras. «Faltan 60 días», recordó el presidente gallego, para poder comprobar quién tiene razón. «No me gustaría nada más que estar equivocado y tener que pedir disculpas», subrayó.
El nuevo plazo para la entrada en funcionamiento de la alta velocidad es una de las 25 exigencias que Galicia formula a un Gobierno central que todavía no ha salido de las urnas. «Antes de que comience el partido planteamos cuáles son las propuestas de Galicia», explicó Feijóo. El presidente justificó el gesto, inédito en sus 11 años al frente de la Xunta, debido a la situación «de bloqueo e incumplimiento masivo» por parte del Gobierno de Pedro Sánchez. «Las cosas que estoy viendo ahora, nunca las vi», aseveró.
Las reclamaciones
La Xunta agrupó sus demandas al Gobierno central en cinco ejes temáticos. El primero tiene que ver con la financiación autonómica y la deuda de 700 millones de euros que la Xunta lleva meses reclamando. Feijóo desveló que todavía no han entrado en caja los 330 millones por las entregas a cuenta que el Ejecutivo ha anunciado que va a pagar. Pero insistió en que todavía faltan 370 millones por el IVA y el cumplimento de los objetivos del déficit. Galicia pide que se le abonen antes de diciembre para poder aprobar los presupuestos con tranquilidad. Feijóo descartó judicializar la reclamación como han hecho otras comunidades mientras haya «una mínima posibilidad» de entendimiento en la vía política y en la administrativa. En materia de financiación autonómica, el presidente recordó las demandas de tener en cuenta aspectos como el envejecimiento o la dispersión de la población a la hora de acometer el reparto de fondos.
El segundo eje tiene que ver con las infraestructuras pendientes. Además del AVE a Madrid, Feijóo reiteró la petición de traspaso de la AP-9, las conexiones ferroviarias con Lugo y Ferrol, la finalización de las estaciones intermodales o la conexión ferroviaria de los puertos de La Coruña y Ferrol prevista en el Corredor Atlántico, entre otras.
La crisis industrial que atraviesa Galicia vertebra el tercer bloque de reclamaciones. En este ámbito, la Xunta reclama que el Gobierno central ponga un precio eléctrico estable a las factorías que son grandes consumidoras de energía como Alcoa . También pidió una estrategia ordenada de transición ecológica para que no cierre la central térmica de As Pontes y una propuesta alternativa para reindustrializar la comarca de Ordes-Cerceda en la que Naturgy clausurará su planta de Meirama. Un nuevo encargo para los astilleros de Navantia Ferrol , para que tengan carga de trabajo mientras no se construyan las fragatas (se prevé que se empezará a cortar chapa en 2022) y la finalización de las «incertidumbres» sobre la ley de costas que afectan a Ence completan las principales peticiones para la industria.
El cuarto eje se centra en los servicios sociales. En este apartado, Galicia pide convocatorias más amplias para poder ampliar las plantillas médicas o mayor implicación económica con la dependencia, entre otras medidas. La cultura y sobre todo la financiación de los próximos años santos centran el último bloque. Feijóo demandó un plan 2021-2032 para apoyar realmente a los próximos Xacobeos. «Estas son nuestras olimpiadas», consideró tras recordar la aportación estatal a este tipo de eventos.
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