Coronavirus Galicia
Galicia, preparada para la desescalada pese a la inconcreción del Gobierno
Feijóo apunta que las cuatro provincias podrían cumplir los requisitos, todavía confusos, para pasar las distintas fases. Apunta que el PIB de la Comunidad caerá «dos décimas» si no lo remedia la etapa de reactivación
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
En medio de las dudas que se agolpan por la inconcreción que emana de las decisiones del Gobierno central, una convicción proclamada sin titubeos: « Estamos preparados para iniciar la reactivación económica ». Alberto Núñez Feijóo, con el último informe de la Consellería de Sanidade sobre la afectación del coronavirus sobre la mesa, fue tajante este jueves tras reunir a su gabinete, como cada semana, en el Consello de la Xunta. «Cumplimos las condiciones... Pero no lo podemos asegurar con certeza porque no sabemos todavía (....) cuáles son las condiciones que tenemos que cumplir para pasar a la fase 1 de lo que el Gobierno viene en llamar desescalada», puntualizó durante una nueva comparecencia telemática en San Caetano.
Como estaba previsto, toda vez que Pedro Sánchez rebajó la categoría del cónclave al declinar su presencia, Feijóo no acudió el Senado, donde se celebró una descafeinada comisión general de las comunidades autónomas, y encabezó el Consello. A Madrid viajó su número dos, Alfonso Rueda, quien dejó patente en la Cámara Alta el rechazo de la Xunta al plan de desescalada de Sánchez, avanzado la víspera por el propio mandatario autonómico. Éste ya había expuesto con meridiana claridad que no puede «avalar» esa hoja de ruta , e insistió este jueves nuevamente en que debe revisarse de arriba abajo para que Galicia le otorgue su respaldo.
Feijóo hizo en su comparecencia una defensa de la adecuación de la Comunidad a la «nueva normalidad» cuando aún se acumulan los interrogantes sobre qué territorios contarán con el beneplácito de La Moncloa para ir saliendo del confinamiento. El presidente de la Xunta aseguró que Galicia «encara esta fase con indicadores epidemiológicos y una capacidad sanitaria que nos sitúan (...) en una muy buena situación»: desde el pico del Covid-19, la presión en UCI ha caído un 73% y la hospitalización, un 65%. El ritmo de contagios diarios ha pasado de rebasar los 500 a moverse en torno al centenar. « Estamos en una situación (...) que desde el punto de vista sanitario es una posición sólida », reafirmó. «No podemos seguir viviendo en una burbuja», previno, con la economía y el empleo en serio riesgo.
De hecho, a la espera de que el Gobierno se decida a compartir sus previsiones de impacto de la pandemia, que Feijóo ha solicitado a Pedro Sánchez hasta en dos ocasiones de forma personal en las reuniones dominicales, el mandatario autonómico apuntó que « la previsión de caída del PIB gallego probablemente esté en dos dígitos », ante una situación «mucho peor que la recesión que sufrimos en 2008», la «peor que vivimos en las últimas décadas». Dependerá, en todo caso, de la evolución en los «próximos meses»; irá «en función del impacto de la reactivación económica y social y del acierto en esa reactivación». Ni siquiera la gravedad del socavón provocado por el Covid-19 ha decidido al Gobierno a desbloquear el Consejo de Política Fiscal y Financiera, el foro donde poner en común, con las comunidades, las recetas para salir del hoyo; pero al menos, celebró Feijóo, el próximo lunes la responsable de Hacienda, María Jesús Montero, mantendrá un encuentro con sus homólogos autonómicos. Está por ver si el cónclave arroja una cierta luz entre tanta sombra.
Punto de corte
La previsión de vuelta a la nueva normalidad de la Xunta, en todo caso, se topa con la inconcreción del plan de desescalada del Gobierno, con el que volvió a mostrarse muy crítico Feijóo. El titular del Gobierno gallego quiso dejar claro que el problema del que adolece es mucho más profundo que aplicar una rejilla en el mapa de España usando como divisiones las provincias en lugar de las áreas sanitarias, como propuso inicialmente el gabinete de Sánchez. Antes de llegar ese punto hay otro error de forma en el documento divulgado el martes: la carencia de marcadores para anticipar los cambios de fase. Es decir: los «criterios concretos» que habrá de cumplir cada zona a la hora de ir adecuándose a las distintas etapas. «Reitero: no conocemos ningún baremo del punto de corte en los indicadores , y es imprescindible», indicó Feijóo. El plan, volvió a lamentar, se lanza igualmente sin disponer aún de datos serológicos que apuntalen esos criterios.
Ante esta ausencia «sorprendente» de un marco específico, Feijóo no quiso pronunciarse al cien por cien respecto de qué calendario pueden esperar los gallegos, pero sí desveló que en la Xunta se manejan «distintas simulaciones» que llevan a considerar que «todas las provincias pueden estar en condiciones de cumplir» los requisitos para superar sucesivas fases. «No sé si un área sanitaria o un distrito sanitario podría no cumplir todos los parámetros. Con carácter general, la mayoría de territorios de las cuatro provincias, la mayoría de los distritos de las siete áreas sanitarias, cumplen los criterios para pasar las distintas fases», aseguró.
Recordó el presidente que en 140 municipios no ha habido contagios en la última semana, por lo que «podrían pasar a la fase 3 de forma inmediata»; y puso el acento sobre la situación injusta que se daría en estos concellos, que deberían esperar seis semanas para aguardar al resto, y para entonces podrían registrar algún caso y verse doblemente discriminados. En su alocución, otra crítica de calado: « Parece ser que lo que digamos los responsables sanitarios no importa y los políticos del Gobierno central, sí ». En el comité de Moncloa «están todos políticos y un experto. Aquí, todos expertos y dos políticos, el conselleiro de Sanidade y yo», apostilló. El domingo, nuevo asalto.
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