POLÍTICA

Ximo Puig apuesta porque el PSOE elija a su candidato antes de repetirse las elecciones

El líder del PSPV Descarta la suma con Podemos y con los nacionalistas, aunque él sí se apoya en ellos

Imagen de la reunión del comité federal del PSOE celebrada este lunes EFE

MANUEL CONEJOS

La incoherencia discursiva se ha apoderado del secretario general del PSPV y presidente autonómico, Ximo Puig, cuando se trata de analizar el controvertido panorama político nacional. Ayer tomó parte del Comité Federal del PSOE en la sede madrileña de Ferraz -cuestión por la que anuló su agenda institucional- y declaró que veía «muy difícil un cambio de izquierdas en España porque no dan los números» para conformar la mayoría parlamentaria necesaria.

Defendió que se hable con Podemos y destacó que «yo lo hago todos los días», aunque remarcó que la suma de las dos formaciones no da para gobernar. Por ello, Puig animó a su partido a «ser humildes y reflexionar para buscar la mejor solución para todos los ciudadanos y hacer un balance autocrítico».

Sorprenden esas dos cuestiones, ya que Puig no hizo autocrítica cuando obtuvo el peor resultado del PSPV en su historia el pasado mes de mayo y se lanzó a un multipacto con Podemos y con la coalición Compromís que alberga a su vez a otras tres facciones. Y también es llamativo que el líder de los socialistas valencianos lanzara el mensaje al líder del PSOE, Pedro Sánchez, de que con Podemos no da la suma y obvia pactar con nacionalistas cuando él en la Generalitat gobierna junto a ellos.

Efectos en el Botánico

De hecho, la vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra, se ha manifestado claramente en favor del «derecho a decidir de los catalanes» sobre su continuidad o no en España y ello no ha sido óbice para que gestionen el Gobierno autonómico a medias, mientras que Podemos se garantiza la aplicación de sus políticas con el mando a distancia que supone su apoyo parlamentario.

A nivel orgánico Puig sí tomó un rumbo claro y es en la dirección de que el PSOE elija a un candidato antes de que se repitan las elecciones generales -cuestión que es la más probable ahora-. En los momentos previos a la reunión, Puig se mostró favorable a que el congreso ordinario del PSOE se celebre «en el tiempo que le toca» y que las «bases tengan capacidad de decisión» en él sobre la continuidad de Pedro Sánchez como secretario general.

Una vez dentro, el líder del PSPV no tomó la palabra, ya que hay una norma no escrita en su formación de que los miembros de la dirección del partido -como él- no hablen en el comité federal. Y así fue, delegó en el secretario de Organización del PSPV, Alfred Boix, quien insistió en que el congreso se debe celebrar en febrero.

Este posicionamiento de Puig, en nombre de la federación socialista valenciana, coloca en una situación muy difícil a Sánchez, ya que su visión fue compartida en la reunión por los líderes de Andalucía, Castilla-La Mancha y Asturias de manera explícita, mientras que Extremadura también está en la misma línea aunque quizá retrasaría el congreso hasta marzo.

Ximo Puig se halla así en una encrucijada difícil, ya que la elección de un líder para el PSOE más «centrista» que Sánchez no vería con buenos ojos su actual coalición con Compromís y Podemos. De hecho, si las negociaciones entre PSOE y Podemos siguen tan encalladas como hasta la fecha ello puede pasar factura al Pacto del Botánico en los próximos meses, ya que es difícil ser enemigos irreconciliables a nivel nacional y socio autonómico.

El PP, a la espera

Mientras, la dirección regional del PPCV espera con interés la resolución del tablero político a nivel nacional, ya que está convencida de que tendrá unas implicaciones importantes en la Comunidad Valenciana. Un pacto entre PSOE, Podemos y fuerzas nacionalistas supondría que el discurso se iría «polarizando cada vez más», según las fuentes consultadas por este diario, y el PPCV se presentaría ante la sociedad como el «muro de contención» de esas fuerzas la izquierda parlamentaria cada vez más «radicalizada». En cualquier caso, en la calle Quart dan por amortizado a Ximo Puig como referente de la izquierda en la región, ya que entienden que será Mónica Oltra quien se presente como líder de esa coalición de izquierdas auspiciada por Podemos y con la anuencia de un PSPV en recesión. Auguran una legislatura de dos años.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación