Del «De Madrid al cielo» al «España es muerte»: seis semanas de insultos y verborrea independentista

El independentismo lleva semanas utilizando la pandemia de coronavirus como excusa inagotable para insultar a España y sus instituciones. La encargada de abrir la veda fue Clara Ponsatí, exconsejera de Educación (sic) de Carles Puigdemont. «De Madrid al cielo», escribió en su cuenta de Twitter el pasado 14 de marzo, cuando los muertos ya se contaban por decenas.

Desde que Ponsatí se lanzó a la piscina -tuvo que excusarse y borrar su lamentable mensaje horas después-, han sido varios los líderes secesionistas (políticos, empresariales y medíaticos) los que han utilizado la pandemia como combustible para sus insultos. «España es paro y muerte , Cataluña es vida y futuro», afirmó esta semana el empresario gasolinero y presidente de la Cámara de Comercio de Barcelona, Joan Canadell. El comentario le valió una batería de críticas, pero Canadell evitó retractarse.

El Gobierno de Quim Torra también ha sido fecundo en insultos, tanto al Gobierno como a la inteligencia de sus propios ciudadanos. «Con la independencia habríamos actuado antes y no tendríamos tantos muertos ni tantos infectados», afirmó hace escasos días la portavoz del Govern, Meritxell Budó. La también consejera de la Presidencia olvidó que la Generalitat negó la importancia del coronavirus durante semanas y el propio Torra atribuyó a la «desinformación» y la «epidemia del miedo» la cancelación del Mobile World Congress el pasado mes de febrero.

Con todo, los insultos más desatados llegan del plano mediático. Dos ejemplos. Las palabras del actor del programa Polònia de TV3 Toni Albà, que acusó al PSC de «matar catalanes» y de hacer una gestión de la crisis pandémica propia del expresidente de Serbia Slobodan Milošević: « Debereis vivir confinados y protegidos el resto de sus vidas. Teneis muertos en los hombros. Algunos lo han hecho de palabra; otros, de obra y otros por omisión», le dijo al líder de los socialistas catalanes, Miquel Iceta. O las palabras de la polemista y escritora Pilar Rahola , que le dijo «Iros a la mierda» al presidente Pedro Sánchez. Puigdemont , por su parte, ha centrado los ataques en la Corona, decribiendola en un comunicado del Consell de la República como una insitución «corrupta y antidemocrática».