Igea, al PSOE tras ser absuelto: «Es un buen día para pedir disculpas»
La Audiencia ratifica la absolución del vicepresidente de un delito leve de amenazas
Con la sentencia en la mano de la Audiencia de Valladolid ratificando el fallo del Juzgado de Instrucción número 5 de Valladolid en la que absolvía a Francisco Igea de una falta leve por amenazas por la que le había denunciado un militante de su partido, Ciudadanos, el vicepresidente de la Junta de Castilla y León aprovechó ayer para espetar al PSOE que «hoy es un buen día para pedir disculpas».
«Hoy espero una disculpa, después de que dijeran que había iniciado la senda maldita de los vicepresidentes de Castilla y León», espetó Igea a los socialistas durante la sesión de control al Gobierno en el pleno de las Cortes, en el que advirtió a los socialistas de que no admite «ninguna lección» de la formación de la rosa en materia de ética, cuestión por la que le preguntó Virginia Barcones. «No me extraña que no quieran acabar con los aforamientos, sino estarían todo el día en el juzgado», incidió Igea, quien por la mañana conoció la sentencia de la Audiencia Provincial ratificando el fallo absolutorio del primer tribunal
Los hechos juzgados se remontan al 8 de marzo de 2019, día en que empezaba la votación de las polémicas primarias, marcadas por el pucherazo, y en las que se enfrentó a la expopular Silvia Clemente. Según la denuncia interpuesta tres días después por Borja Collantes, responsable de redes de Ciudadanos en Valladolid , se encontró con Igea y tras una discusión éste le amenazó poniéndole el dedo índice entre ceja y ceja y diciendo: «La próxima vez que hables de mi familia te reviento la cabeza». Durante el juicio, Igea negó esas palabras, reconociendo que había sido una discusión acalorada.
Recurso de Collantes
No satisfecho con la absolución, Collantes presentó un recurso con «una valoración distinta y contradictoria que se pretende que prevalezca por la ofrecida, de manera objetiva e imparcial, por la juzgadora de instancia», señala la Audiencia en su sentencia, en la que comparte «íntegramente» el fallo anterior dados los testimonios y «las especiales circunstancias que concurrían en el caso», que hacen que no haya «quedado suficientemente esclarecidas las circunstancias en las que se produjeron los hechos».
Ya por la mañana, Igea, celebró su absolución definitiva y pidió que la política no se base en meter la mano «en el cubo de la basura» para atacar al oponente. Así lo apuntó en el que consideró «un buen día» por confirmarse lo que confiaba que «acabaría así».
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