Bolsas o contenedores

Con sus altas y bajas continúa la polémica sobre lo de situar en el casco histórico de Toledo el bolseo o la instalación de contenedores para recoger los residuos hogareños de todos los días. La alcaldía se inclina por la continuidad de la primera opción, en una opinión particular me parece la correcta dada la monumentalidad histórica de esta Ciudad Patrimonio de la Humanidad.

Los contrarios al bolseo se basan en que la población de gatos callejeros suelen romper las bolsas para buscar alimento, con lo cual la zona queda en mal estado por los estropicios de abandono en su entorno. Pero también es verdad, que es bastante complejo la colocación de contenedores al lado de una geografía histórica que afearía el conjunto donde pudieran ubicarse.

Lo idóneo es perfeccionar el sistema de bolseo, como por ejemplo, esparciendo en donde se depositan los desechos hogareños un líquido repelente para la población gatuna, que la hiciera desistir de sus incursiones nocturnas para rasgar las bolsas y esparcir su contenido por doquier. También la vecindad del Casco debe ser muy escrupulosa en cuanto a lo de respetar los horarios, impuestos por la ciudad, para que el bolseo haga acto de presencia, evitándose así una fácil contemplación para el turismo en general.

Y en aquellos espacios apartados y un tanto ocultos pues se pueden colocar un pequeño número de contenedores que ayudarían a la recogida de la basura sin causar perjuicio alguno a la generalizada visualización de la zona monumental del entorno. Lo de la recogida de la basura vecinal de siempre ha tenido seguidores y detractores y continuará tal cual, aunque con el adecuado razonamiento y comprensión el bolseo es mucho más adecuado para el corazón histórico de una ciudad admirada en el mundo entero.

Luego que siga lo que ya está, con las aportaciones más adecuadas e inteligentes para que se causen las menos molestias posibles. Con un poco de suerte y de ingenio se lograría lo mejor para todos.