La Palma, sin opción a incinerar a sus difuntos, busca solución
Este camposanto municipal tenía la única incineradora disponible, por lo que la cremación no es posible en la isla desde tras la pérdida de estas instalaciones al sepultar la lava el cementerio de Las Manchas
«Mi madre falleció hace unos días y su deseo explícito era ser incinerada... cada día que pasa me cuesta 85 euros más y la opción es un nicho en el cementerio de Tijarafe, pagando otra vez y sin cumplir su voluntad. Esta es la queja de Katja a través de las redes sociales. Su problema es compartido por decenas de personas desde que el volcán de Cumbre Vieja sepultara el cementerio de Las Manchas y la única incineradora de la isla.
Desde hace tres meses, son muchos los vecinos que se han visto obligados a lidiar no solo con el duelo de haber perdido sus casas sino también el dolor de no poder cumplir con las últimas voluntades de sus seres queridos. La mayoría han tenido que darles sepultura a pesar de preferir la cremación, otros han tenido que afrontar gastos extras por el traslado del difunto a un crematorio de Tenerife. Para dar una solución a este problema sobrevenido y que ha dejado sin solución los deseos de quienes han fallecido en los últimos meses, el Cabildo de La Palma ha adquirido un horno crematorio , que se instalará en el Cementerio Comarcal de San Urbano, en Breña Baja.
La consejera Nieves Rosa Arroyo señaló ayer que es urgente poder seguir prestando este servicio en la isla, atender la demanda de las familias y respetar la voluntad de las personas, sin causar en este proceso más daño moral o económico al tener que trasladar a la persona fallecida a otra isla. La consejera detalló que el horno crematorio se instalará en un terreno de titularidad del Cabildo y se espera que esté en funcionamiento en cuatro meses, tiempo que requerirá la empresa para poner la instalación en funcionamiento. Se trata de un equipo móvil, que ha contado con un presupuesto de 273.626,72 euros.
La única incineradora de la isla de La Palma se habilitó en el cementerio Nuestra Señora de Los Ángeles, más conocido como el cementerio de Las Manchas, en 2006. Esta instalación dio a la ‘isla bonita’ la posibilidad de incinerar a sus difuntos, con un servicio de ámbito insular. Se inauguró por considerarla «fundamental» y así ha demostrado ser en los últimos meses de erupción volcánica.
En el día 85 de actividad, el volcán sepultó el cementerio y este se sumó a los iconos arrasados por la erupción de Cumbre Vieja. Tras las pruebas de retirada de lava con éxito en el cruce de La Laguna, representantes del Instituto Geográfico Nacional han tomado muestras en la zona que invade el cementerio para realizar pruebas y ver la viabilidad de la recuperación parcial del camposanto.
De acuerdo a las primeras valoraciones, una parte del cementerio y del daño podrá repararse, mientras que otras zonas no. El Ayuntamiento de Los Llanos trabaja en un proyecto de remodelación del cementerio, con la precaución y la cautela necesarias para trasladar los restos que sean recuperables a una nueva ubicación.
Regreso de los vecinos
Además, la primera prueba realizada con éxito el pasado lunes para la retirada de la lava en el cruce de La Laguna, en el municipio de Los Llanos de Aridane, junto a la buena calidad del aire, permiten a las autoridades ser optimistas sobre la posibilidad de que los vecinos puedan comenzar a volver a sus casas a partir del 3 de enero.
Según fuentes oficiales, la decisión sobre el posible retorno parcial y progresivo de los vecinos de El Paso y Los Llanos de Aridane evacuados con motivo de la erupción volcánica se ha tomado tras consultar a los expertos que siguen al día la evolución de la zona, sobre todo tras comprobar que no hay problemas con la calidad del aire.
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