Juicio del caso Nóos
Un testigo confirma que Urdangarín cobró 375.000 euros en Suiza por un trabajo como asesor
El antiguo presidente de Aguas de Valencia ha indicado que el marido de la Infanta le dijo en 2008 que era mejor que trabajase fuera de España
Una de las declaraciones más destacadas en la sesión del juicio del caso Nóos de este jueves ha sido la del empresario Eugenio Calabuch , que en 2008 era el presidente de Aguas de Valencia. A preguntas de la fiscal Anticorrupción, Ana Lamas , el testigo ha explicado que en aquella época se reunió con Iñaki Urdangarín , por mediación de Miguel Zorío , para estudiar la posibilidad de una posible colaboración. En concreto, Urdangarín debería buscar posibles inversores extranjeros.
El testigo ha señalado que Urdangarín le dijo que, en caso de llegar a un acuerdo, su labor debería desarrollarse fuera de España. Cabe recordar, en este contexto, que el pasado mes de abril el antiguo asesor externo de la Casa del Rey, José Manuel Romero , explicó ante el tribunal que en 2005 había recomendado a Urdangarín que se desvinculase del Instituto Nóos y de sus sociedades afines, al considerar que su actividad en esas mercantiles «era inadecuada» para el marido de una Infanta. Ese habría sido el motivo por el que Urdangarín hizo a Calabuch aquella propuesta concreta.
Calabuch ha indicado que la proposición de Urdangarín de trabajar fuera de España no le pareció mal. «Queríamos buscar fuera por nuestra parte», ha explicado. Asimismo, ha confirmado que en mayo de 2008 se firmó el convenio de colaboración, con la empresa Alternative General Services, de Robert Cocks , presunto testaferro de Urdangarín. De ese modo, supuestamente, el marido de la Infanta habría podido mantener la opacidad de determinados ingresos. Los pagos a Urdangarín, de carácter trimestral, se hicieron a través de una cuenta domiciliada en Suiza , por un importe global de 375.000 euros.
«En aquel momento sigue siendo un personaje español que tiene que trabajar fuera y se le paga fuera», ha añadido el testigo, que ha señalado que no vio nada extraño en la forma de pago acordada. A preguntas de la abogada del Estado, María Dolores Ripoll , Calabuch ha dicho que nunca oyó habla de Aizoon, la mercantil cuya titularidad compartían Urdangarín y la Infanta.
Por su parte, el abogado de Diego Torres , Manuel González Peeters , le ha preguntado al testigo si su cliente había colaborado con Aguas de Valencia. Calabuch ha respondido de manera afirmativa y ha añadido que se trataba de un proyecto de responsabilidad social corporativa. «Sé que se hizo el trabajo y que se ha puesto en marcha», ha afirmado.
Inspección fiscal
A continuación, ha declarado María Wandosell , editora de Motorpress Ibérica. La testigo ha confirmado que Urdangarín fue miembro del consejo de administración de la citada empresa, en calidad de asesor. Sus trabajos fueron facturados a Nóos Consultoría Estratégica y a Aizoon. Seguidamente, ha comparecido el abogado Stefan Meyer, también empleado de Motorpress Ibérica. «Urdangarín participaba activamente en los consejos», ha explicado, para añadir: «Además, abría las puertas al mundo olímpico». Posteriormente, ha declarado el antiguo director financiero de la citada empresa, Rafael Parada.
El nuevo testigo ha confirmado que Aizoon presentó en su momento diversas facturas por «servicios profesionales». Asimismo, ha indicado que nunca encontró ningún contrato entre Aizoon y Motorpress Ibérica. Parada ha confirmado que hubo una inspección fiscal en la que Hacienda concluyó que los pagos hechos a Aizoon no eran deducibles en el Impuesto de Sociedades . A preguntas del abogado de Urdangarín, Mario Pascual Vives, el testigo ha explicado que su empresa no fue sancionada.
El último testigo en declarar este jueves ha sido Francisco Javier Jiménez de Andrade . El testigo ha indicado que era asesor de José María Treviño , otro presunto testaferro de Urdangarín. A preguntas de la fiscal, Jiménez de Andrade ha dicho que nunca hizo de intermediario entre Treviño y Urdangarín. En cambio, sí ha reconocido que facilitó el nombre de Cocks a Treviño. Asimismo, ha confirmado que Urdangarín y Aguas de Valencia firmaron un contrato por valor de 375.000 euros. Jiménez de Andrade percibió, por su parte, 70.000 euros, mientras que Cocks habría cobrado el 5 por cien del total estipulado en aquel contrato.
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