Inditex (Zara) se recupera tras las pérdidas y gana 671 millones de euros hasta octubre

Teresa Sánchez Vicente

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15/12/2020
Actualizado a las 17:56h.

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Tras los números rojos llega la calma a la sede de Inditex -dueño de Zara, Massimo Dutti o Stradivarius-, desde donde anunciaron este martes que han navegado la tormenta tras sufrir fuertes vaivenes a lo largo de 2o2o. La multinacional textil española consigue así «transformar la situación provocada por el Covid-19» tras obtener un beneficio acumulado de 671 millones de euros en los nueve primeros meses de su año fiscal (febrero a octubre) y de 866 millones de euros en el tercer trimestre. La recuperación del grupo textil se basa en tres pilares principales: la gestión integrada del modelo logístico del negocio online junto a la venta física, la reducción del inventario con tiradas cortas de prendas y el crecimiento del comercio electrónico. A esto se suman otros dos factores, según explican fuentes del sector, como que más de la mitad de la producción esté centrada en fábricas de países cercanos a la sede de Arteixo y la optimización de la red de tiendas que ahora ascienden a un total de 7.197 frente a las 7.486 contabilizadas hace justo un año.

Pese a esta recuperación el beneficio es un 75,3% menor al generado en el mismo periodo del año anterior, cuando ganó 2.720 millones de euros. El grupo dueño de Zara sí logra recuperarse de las pérdidas de 195 millones de euros que arrastraba en el primer semestre fiscal debido al cierre de tiendas y al desplome del consumo en la primera ola de la pandemia.

Las ventas siguen tocadas por las consecuencias de la crisis del coronavirus, aunque continuaron en la senda de recuperación y alcanzaron los 6.052 millones de euros en el tercer trimestre , una cifra que supuso un retroceso del 14% respecto al mismo periodo del año pasado, cuando ascendieron a 7.000 millones de euros. No obstante, la caída fue menor si se compara con el porcentaje del -31% del segundo trimestre y del -44% sufrido en el primero por el confinamiento estricto . En los nueve primeros meses del ejercicio en curso, la facturación alcanzó los 14.085 millones de euros frente a los 19.820 del año anterior, es decir, un 28,9% menos.

El grupo textil también exhibe un «fuerte desempeño operativo y flujo de caja» con una bajada de los gastos operativos del 10% al cierre del tercer trimestre. «A 31 de octubre el inventario se reduce un 11% y la posición financiera crece un 7% hasta 8.265 millones de euros alcanzando un máximo histórico », informa la compañía. La recuperación también se dejó notar en el indicador que mide la ganancia bruta por artículo vendido, que se situó en el 58% frente al 58,2% de 2019. El grupo basó este desempeño en la gestión del modelo de negocio y en la reducción de un 11% del inventario de prendas.

Otra de las palancas de la recuperación residió en el comercio electrónico, que ha resultado beneficiado por la pandemia y la distancia social . La venta online siguió disparada y creciendo «a un ritmo muy alto con un 75% a tipo de cambio constante en los nueve primeros meses del año, el 76% en el tercer trimestre», según la nota enviada a los medios.

El presidente de Inditex, Pablo Isla , remarcó que los resultados «son consecuencia directa de una gestión muy eficiente en todas las áreas de la compañía con una coordinación precisa entre todos los estadios de nuestro modelo -diseño, producto, fabricación, logística, tiendas y online. Son también un reconocimiento a la capacidad diaria para reaccionar y adaptarse a un entorno difícilmente previsible , y a la apuesta irrenunciable por ofrecer la mejor calidad de producto y de servicio».

De cara al futuro, Isla mostró su confianza y aseguró que Inditex se encuentra en una «muy fuerte posición» para encarar 2021 y 2022, después de demostrar que es capaz de mantener márgenes y generar caja «en un contexto tan desafiante» . «Veo a la compañía en una posición muy fuerte», añadió Isla durante la conferencia de analistas.

«La gestión del negocio con un bajo nivel de inventario es uno de los aspectos más destacados del modelo de negocio , que se ha acentuado desde 2018 gracias a la gestión integrada del 'stock', al RFID (tecnología de identificación de prendas) y al SINT (herramienta para tramitar pedidos online desde los almacenes de las tienda), así como a la optimización de nuestra red de tiendas y a la mejora del servicio al cliente que todo ello representa», apostilló el presidente de Inditex.

Isla también se comprometió a mantener su política de dividendo. La multinacional abonó 0,35 euros por acción en noviembre como dividendo ordinario del ejercicio 2019. Por otro lado, el dividendo extraordinario pendiente -78 céntimos por acción- será pagado entre 2021 y 2022 en los meses de mayo y noviembre.

El grupo textil también avanza algunos datos respecto al cuarto trimestre y vaticina un nuevo retroceso de las ventas por las nuevas restricciones para frenar la segunda ola de la pandemia de coronavirus. Durante el mes de noviembre, las ventas a tipo de cambio constante se situaron un 19% por debajo de las del año pasado con el 21% de las tiendas sin posibilidad de abrir sus puertas al público. Del 1 al 10 de diciembre, la facturación a tipos constantes moderó su retroceso al 13% con el 8% de los establecimientos cerrados y un 10% adicional que no operaron durante el fin de semana.

Mientras tanto, la multinacional española ha seguido desarrollando su plan de desarrollo con aperturas en 25 mercados , entre ellos China, México, Rusia, Alemania, España o Arabia Saudí. Además, Zara amplió a 85 los mercados con venta online integrada a la red local de tiendas, que se suman a los 106 mercados con venta online a través de su web global.

A pesar de dejar atrás las pérdidas, los inversores no se mostraron conformes con los resultados presentados por el grupo dueño de Zara. A las 13.00 horas, Inditex encabezaba los números rojos dentro del Ibex 35 y retrocedía un -2,62%, hasta los 26,58 euros por título, recuperó un poco y a las 17:30 cerró el día en -2,48 % y a 26,77 euros por acción.

Los inversores penalizan así la caída en las ventas y en el beneficio, que fue un 75,3% menor al cosechado un año antes. A esto se une que el avance de datos del cuatro trimestre adelantaron un nuevo retroceso en la facturación debido a las restricciones añadidas para frenar la segunda ola de coronavirus.

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