'El lado oscuro': La droga en el Carnaval, una de las miserias de esta fiesta

Entonan la presentación aún con más rabia. Se han introducido en la piel de este personaje perverso, animal, encerrado en una mazmorra y dispuesto a desprenderse de sus cadenas por este tiempo en febrero, el mes de la libertad. La disposición en escena resta brillo al coro en la interpretación, plenipotenciario pero sin la 'limpieza' de siempre. Mínimas grietas en un grupo que es una selección prodigiosa de voces, que roza el sobresaliente en su propuesta.

Otra cosa es que no sea acertada y quizás por ello 'El lado oscuro' provoque esa disrupción entre los actores y parte del público. En ningún momento logran derribar ese invisible cristal, también por la innovación en el tango y por supuesto por el estilo literario, en exceso prosaico. «La droga no vale ná» merece una vueltecita.

Buena elección de temas para aspirar a este último paso, que en la modalidad nadie lo tiene asegurado. Al polvo blanco («empezó como un juego y luego te apoderaste ya de mi vida»), pero enfocado en este Carnaval, donde la cocaína hace estragos y se destaca como una de las miserias de la fiesta. Y al contraste entre los atardeces y la madrugada de Cádiz, cuando en la oscuridad se ocultan las tristes vidas de los sin hogar. Una tierra de postal en la que algunos se mueren bajo la luna.

La música de los cuplés engancha, se ajusta al tipo chulesco y vacilón, y el final recuerda al de Los lacios de Selu. Lo que cada uno tiene en su cabeza...

Buen popurrí, que suena mejor que nunca y donde brillan cuartetas como la de Cinema Paradiso de Morricone. Diversos estilos desde la fusión de Big Bad Voodoo Daddy hasta Café Quijano, pasando por temas originales del propio Julio Pardo. Dentro de la élite, en su arriesgada (bienvenida) apuesta por diferenciarse de lo anterior. han dado un paso atrás con respecto a otros años.

Así cantaron en preliminares y cuartos de final

Tú puedes puntuar a la agrupación.