Cádiz CF

... Y perdimos como siempre

No fue un buen partido del Cádiz CF, al que se vio demasiado blando atrás y sin capacidad para mover el balón con acierto y criterio

El sistema defensivo hacía aguas por todos lados desde que comenzó el encuentro ante el Atlético

El Cádiz CF no pudo sumar puntos en Madrid. EFE
Pepe Reyes

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Acariciamos como nunca la victoria pero sucumbimos como siempre. El feudo del Atlético de Madrid parece maldito para las huestes amarillas, que nunca han conseguido asaltar la fortaleza rojiblanca.

Durante muchos minutos del duelo del pasado domingo parecía que por fin había llegado ese día, cuando un rotundo, sorprendente, cero a dos en el marcador así lo presagiaba. Pero un gol del equipo local antes del descanso y, sobre todo, el empate en el primer minuto de la segunda parte, finiquitaron bruscamente el desbordado caudal de las ilusiones.

Siempre quedará el consuelo de que supimos competir y que hasta pusimos contra las cuerdas a un fortísimo rival, al que logramos hacer dos goles ante la mirada atónita de su estupefacta afición. Pero no fue un buen partido del Cádiz CF, al que se vio demasiado blando atrás y sin capacidad para mover el balón con acierto y criterio.

Desde que arrancó el encuentro, el sistema defensivo hacía aguas por todos lados y las ocasiones colchoneras se sucedían con preocupante reiteración y claridad. El cambio de sistema a una defensa de cinco no dio el resultado deseado y, como ocurriera en los contados ensayos precedentes, originó una fragilidad y un desorden en la zaga alarmantes.

 

Y volvió a confirmarse que hay hombres que, por su estado actual de forma, aportan al equipo la estabilidad y el equilibrio que éste necesita y de cuyas ausencias se resiente una enormidad. Luis Hernández y Fali constituyen la pareja de centrales que aporta verdadera seguridad atrás, pues cada vez que se ha dado entrada a otros hombres en esta demarcación, el conjunto lo ha sufrido notablemente. Por eso eso han saltado las alarmas y la afición permanece en vilo ante el desconocido alcance de las lesiones de ambos.

Situación parecida ocurre en el centro del campo, donde Rubén Alcaraz se ha erigido en su director y su presencia resulta indispensable. Su salida del campo en el Metropoloitano, junto a la de Fali, supuso el punto de inflexión que marcó el devenir del partido. Puntos que se escaparon y se habrán de recuperar.

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