Cádiz
Pombo se queda con lo bueno
El maño prefiere olvidar el momento en el que se fue al ostracismo y se queda con el «espectacular» año del equipo
La trayectoria de Jorge Pombo ha sido decepcionante a pesar de haber coincidido su etapa en el club con dos éxitos culminantes y de los que ha formado parte: el ascenso y la permanencia en Primera. El jugador maño aún tiene dos años de contrato pero ya ha recibido del club la noticia de que se le busca una salida.
El balance que hace Pombo del año lo hace desde el orden colectivo y como no puede ser de otro modo hace una lectura triunfal. «Toda la temporada ha sido magnífica. En lo colectivo ha sido extraordinaria», dice a los medios oficiales del club.
En la misma línea, comenta que «no se le puede pedir más al equipo , ha habido mucho compromiso, todos hemos aportado nuestro granito de arena y hemos puesto el cien por cien para tener al Cádiz donde se merece, que es en LaLiga Santander».
Y es cierto que si bien ha acabado la temporada sin contar en absoluto con Cervera, el ex del Zaragoza sí que ha aportado su granito de arena en un momento clave de la temporada como fue la primera victoria en Liga cosechada en la segunda jornada ante el Huesca en El Alcoraz, donde marcó el gol de la sentencia (0-2).
Pombo también destacó que «hemos sido regulares y hemos estado bien». Y agregó que «nunca tocamos la zona de descenso y siempre estuvimos en mitad de la tabla».
Su entrada en barrena
De hecho, fueron las primeras jornadas de Liga cuando Pombo congregó las mejores críticas del equipo. Fue el mejor de los suyos en el mal arranque liguero en Carranza ante el Osasuna. Lo siguió siendo en Huesca y frente al Sevilla en la tercera jornada de Liga. Llegó un encuentro, en Bilbao ante el Athletic , que se jugó entre semana y en el que Cervera dio descanso a muchos titulares, entre ellos Pombo, que no jugó. Ganó el Cádiz CF en San Mamés dando la campanada, pero a pesar de su suplencia Cervera volvió a ponerlo en el once en el siguiente encuentro de Liga ante el Granada en Carranza. Y hasta ahí. Fue curioso, pero lo que pasó aquel día fue el comienzo de una dinámica nada atractiva para el jugador, que pese a verse en el ostracismo la gran mayoría de la temporada no ha perdido el buen humor en ningún momento dando muestra del excelente compañerismo que reina en ese vestuario.
Pombo jugó entero ese primer tiempo en el que el Granada se iba al descanso ganando 0-1 y después de bailar al Cádiz CF, que fue capaz de empatar (con gol de Alejo) el encuentro en una segunda parte en la que incluso pudo llevarse el encuentro. Pero antes, durante el primer tiempo, el cabreo de Cervera era chico ya vio a los suyos muy superados por el conjunto nazarí, que pudo sentenciar el encuentro hasta en tres ocasiones manifiestas. Y en mitad de este baile, Pombo recibió hasta en dos ocasiones las encendidas preguntas de su entrenador, que veía que se había lesionado tras un golpe con un contrario. Efectivamente, la sensación era que Pombo estaba apurando en el campo pese a estar 'tocado'. No se le veía nada fresco y el aragonés se empeñó en seguir en el campo a pesar de que no le salía absolutamente nada y no colaboraba en defensa a gusto de su técnico, que no dejó pasar el descanso para cambiarlo.
Pombo se quedó en las duchas y no comenzó siquiera la segunda parte en la que el Cádiz CF, ya sin él, fue capaz de nivelar la balanza ante un adversario que pasó de ser muy superior a dominado. Fue el últmo encuentro como titular en Liga de Pombo, que a medida que fue avanzando la temporada se fue apagando de manera brutal.
Por eso mismo, cuando es prguntado por un momento malo de la temporada no engaña a nadie. «Es difícil hacer un balance personal porque no he tenido los minutos que uno quiere tener o cree que se merece». En la misma línea aportó que «ha sido mi primer año en Primera y cuando he jugado he intentado hacerlo lo mejor posible. Me quedo con otro año más en Primera, la permanencia, el gol que metí en Huesca. Me quedo con todo el año», diho queriendo ser positivo.
Pombo disfrutó en esas primeras jornadas y debido a ello se queda con el momento ««del gol que marqué en Huesca o el primer partido en Carranza debutando en Primera. Certificar la permanencia contra el Huesca fue bonito. Me quedo también con esa victoria en Valdebebas o en casa contra el Barça».
A pesar de su balance personal, califica la temporada del equipo como «espectacular».
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