Uribe agradece el cambio de postura de Chávez frente a las FARC
El presidente venezolano se reúne mañana con Fidel Castro, a quien no ve desde marzo de 2007
BOGOTÁ Actualizado: GuardarTras meses de frío y tenso distanciamiento, la relación entre Venezuela y Colombia puede entrar en una nueva fase, esta vez de entendimiento. Un nuevo escenario propiciado por el cambio de postura del presidente venezolano, Hugo Chávez, hacia las FARC, a las que por primera vez ha pedido que abandonen las armas sin condiciones. Un giro bien acogido por el mandatario colombiano, Álvaro Uribe, que le ha agradecidido el gesto. En breve ambos mantendrán un encuentro para normalizar las relaciones.
Al paso inicial de Chávez le ha seguido el de Álvaro Uribe, que ha agradecido las declaraciones de su homólogo venezolano, marcando distancia con las FARC, porque contribuyen a alcanzar la paz en el país.
"Quiero reiterar los agradecimientos al presidente Hugo Chávez por los comentarios recientes que ayudan bastante para que Colombia rápidamente alcance la paz definitiva. Yo creo que fueron unos comentarios positivos", ha declarado Uribe.
Los dos mandatarios han mantenido una relación tensa desde finales del pasado año, cuando el presidente colombiano suspendió la mediación de Chávez ante las FARC para lograr la liberación de un grupo de secuestrados por los terroristas y por sus posiciones encontradas frente a la guerrilla.
Ahora Uribe ha anunciado que en los próximos días se reunirá con Chávez para abordar diferentes temas de la agenda bilateral. "Es una reunión para los próximos días, no sé la fecha, para tratar todos los temas de la agenda con la hermana república bolivariana de Venezuela", ha apuntado el mandatario colombiano tras un acto de Gobierno.
Fuentes de la Presidencia de Colombia han adelantado que el encuentro se producirá en territorio venezolano antes del 15 de julio y que con él se pretende normalizar las relaciones entre los dos países.
Meses de enfrentamiento
Las tensiones entre Chávez y Uribe comenzaron cuando el primero acusó al segundo de ser un "peón" del imperio de Estados Unidos y de tener nexos con las mafias del narcotráfico y los escuadrones paramilitares de ultraderecha. Uribe respondió y acusó a Chávez de legitimar el terrorismo de las FARC y de buscar liderar un proyecto expansionista en Iberoamérica apoyado con los recursos provenientes de la exportación del petróleo.
Chávez mantuvo durante varias semanas sus ataques verbales a Uribe, que optó por guardar silencio. Sin embargo, Chávez organizó dos misiones humanitarias que en enero y febrero recibieron en medio de la selva de Colombia a seis políticos secuestrados, después de lo que pidió a la comunidad internacional reconocer el estado de beligerancia a las FARC, posición que Bogotá rechazó.
Las tensiones llegaron a su peor momento en marzo de este año cuando Chávez ordenó movilizar tropas en la frontera con Colombia. Era su forma de mediar en favor de Ecuador en la disputa que mantenía con Bogotá después de que los militares colombianos bombardearan una zona selvática ecuatoriana en el ataque en el que murió el líder de las FARC 'Raúl Reyes'.
Aunque la crisis que enfrentaba a Colombia con Ecuador y Venezuela y que despertó temores de un conflicto regional se superó durante la cumbre del Grupo de Río, en República Dominicana, volvieron a surgir nuevas diferencias por ataques verbales de Chávez a Uribe.
A pesar de todo lo anterior, el mandatario venezolano, principal crítico de Estados Unidos en Iberoamérica, ha sorprendido al pedir a las FARC que liberen sin ninguna contraprestación a 40 rehenes políticos, incluida la ex candidata presidencial Ingrid Betancourt. Chávez también aseguró que la guerra de guerrillas no tiene ninguna justificación, tesis que respaldó días después el presidente de Ecuador, Rafael Correa.