La idea delirante es una creencia falsa basada en una inferencia incorrecta de la realidad, que es firmemente sostenida por el sujeto, a pesar de que hay una evidencia clara y razonable de lo contrario. Cuando una persona tiene una o varias ideas delirantes durante como mínimo un mes se considera que ese individuo tiene un trastorno delirante, que es un trastorno psicótico sin que haya presente otra patología significativa.
Las ideas delirantes pueden ser extravagantes, que son cosas que pueden ocurrir como, por ejemplo, pensar y estar convencido de que tu pareja te está siendo infiel; o bizarras, que son situaciones poco probables, como que te están persiguiendo extraterrestres.
No hay que confundir el trastorno por ideas delirantes con la esquizofrenia. De hecho, este trastorno es mucho menos común. Este puede surgir por un trastorno de personalidad paranoide previo. En estas personas, la desconfianza permanente y la sospecha hacia los demás comienzan en la edad adulta temprana y se prolongan durante toda la vida.
Dentro del trastorno por ideas delirantes se reconocen varios subtipos:
- Erotomaníaco : los pacientes creen que hay otra persona que los ama y es muy normal que se esfuercen en conseguir contactar con el objeto de su idea delirante mediante llamadas, cartas o incluso llegar a la vigilancia y el acecho. En muchos casos, esta persona objeto suele tener un estatus social más elevado que el de la persona con el trastorno delirante.
- Grandiosidad : las personas que lo padecen creen que tienen un talento extraordinario o que han hecho un descubrimiento. Muchas veces pueden estar relacionadas con contenido religioso.
- Celoso : los pacientes están convencidos de que su pareja le es infiel. No hay ningún motivo en el que se base esa creencia, pero la persona afectada se apoyará en evidencias dudosas.
- Persecutorio : los pacientes con esta idea delirante creen que son los protagonistas de una conspiración y que está siendo engañado, espiado, perseguido, envenenado o drogado para que no pueda conseguir sus objetivos a largo plazo. Es muy corriente que el centro de la idea delirante esté en alguna injusticia que tiene que resolverse de manera legal, por lo que, en muchas ocasiones, hay intentos de acudir a los tribunales e instituciones gubernamentales.
- Somático : las personas afectadas tienen una idea delirante relacionada con una función corporal. Por ejemplo, que desprenden un olor insoportable o que tiene una deformidad física.
- Mixto : cuando el paciente tiene varias ideas delirantes mezcladas y no hay ninguna de ellas que destaque sobre las demás.
- No especificado : se aplica cuando la creencia delirante no está especificada con claridad.
Tratamiento para los trastornos de ideas delirantes
El tratamiento para este tipo de trastornos consiste en aliviar los síntomas, reducirlos y en hacer que la persona afectada pueda empezar a pensar con más claridad. Para ello es fundamental que el terapeuta consiga una relación de plena confianza con su paciente y así poder ir avanzando poco a poco. El terapeuta tendrá que aceptar las ideas delirantes de su enfermo, siendo conscientes de que son creencias.
Si el paciente es considerado peligroso, puede ser necesaria una internación. En algunos casos se suministras antipsicóticos, porque pueden suprimir los síntomas.
El psicólogo Tomás Navarro explica por qué es importante protegerse emocionalmente de algunas personas. Es una de las claves de su libro 'Tus líneas rojas', cuyas ideas comparte cada 15 días en ABC Bienestar