Fitness

Yoga por la mañana: una garantía de buen humor para afrontar el día

La profesora de yoga Stefanie Michelle cuenta por qué practicar yoga a cualquier hora del día, y especialmente por la mañana, es todo un acierto

En la imagen, Stefanie Michelle, profesora de yoga. Adobe Stock
Melissa González

Melissa González

Esta funcionalidad es sólo para registrados

A todos nos pasa que cuando suena el despertador por las mañanas -o la alarma del móvil- queremos darnos media vuelta y dormir otro poquito. Lo cierto es que madrugar cuesta un poco, pero si es para hacer yoga , los beneficios de afrontar el día desde bien temprano son numerosos.

No a todos nos viene bien ejercitar el cuerpo a primera hora de la mañana y esa es la razón por la que los gimnasios están abarrotados de gente a última hora de la tarde, pero si tienes oportunidad de practicar yoga con la primera luz del día, hazlo. Al menos, eso es lo que garantiza Stefanie Michelle , profesora de yoga y meditación. La experta imparte clases en Gong Yoga, con dos centros en Madrid, y nos cuenta por qué es tan importante practicar esta disciplina.

En cualquier ámbito de la vida, lo que más cuesta es empezar, ¿verdad? ¿Cómo se empieza en el yoga?

Antes de empezar a hacer yoga es importante saber que no necesitas ser flexible o fuerte; esas cualidades son consecuencias de la práctica. No te tienes que adaptar al yoga, el yoga se adapta a ti. A medida que vas practicando los músculos se fortalecen y las articulaciones se vuelven más flexibles. También es importante saber que la respiración es la base, durante la práctica de yoga inhalamos y exhalamos por la nariz de forma fluida y continuada. También aconsejaría que nos olvidáramos del resultado, no existen personas malas para el yoga, de hecho, la práctica mala es la que no se hace. El yoga se trata de conectar con el momento presente a través de las sensaciones y la respiración, no pide ninguna exigencia. Y es una práctica mental, donde por supuesto el cuerpo también se lleva lo suyo.

¿Los cambios físicos y mentales tienen pronta notoriedad?

Hacer yoga de forma regular no solo mejora nuestra salud cerebral y nuestra aptitud física, sino que también impacta en las funciones que supervisa el cerebro, regulando el estrés, la ansiedad, funciones hormonales, el sueño, la digestión, presión sanguínea, apetito sexual, estado de ánimo, capacidad de aprendizaje, memoria, expresión de la compasión y la empatía, el envejecimiento... Para notar los beneficios se necesita de una práctica constante, no importa cuantos días a la semana o cuanto dure la sesión de yoga, lo importante es la constancia. Y yo pienso que desde el primer mes se empiezan a ver algunos cambios.

¿Es bueno, por tanto, practicar yoga todos los días?

Si nos ponemos filosóficos, el yoga no se trata únicamente de hacer asanas; el yoga es un conjunto de técnicas en las cuales la práctica de posturas es solo una de esas técnicas. Los yoguis hacemos yoga todos los días, dentro y fuera de la esterilla. Y en cuanto a la práctica de āsanas (posturas) sí se puede practicar todos los días, aunque cuando estamos empezando es aconsejable hacerlo dos o tres días por semana para dejar que el cuerpo descanse.

¿Existe un mejor momento para practicar esta disciplina?

El mejor momento para hacer yoga es el día y la hora que tú puedas, aunque bien es cierto que por la mañana siempre nos dará el plus de empezar nuestro día con una mejor actitud, con la sensación de ligereza y calma que necesitamos para afrontar lo que nos traiga el día. Yo creo que eso nos garantiza el buen humor, la buena disposición y energía.

«El yoga es una práctica mental donde, por supuesto, el cuerpo también se lleva lo suyo»

Stefanie Michelle

profesora de yoga

Si lo practicamos por la mañana, ¿existen algunas asanas que sean más aconsejables que otras?

Podemos hacer cualquier postura por la mañana, por supuesto teniendo en cuenta el nivel donde estemos, o el tiempo que tengamos de haber empezado a practicar yoga. Siempre hay que empezar a calentar un poco el cuerpo para luego llegar a posturas más exigentes o avanzadas. Pero podemos empezar con posturas de la vaca y el gato para movilizar la columna, el perro mirando abajo, postura del triángulo apara estirar los costados, secuencia de los guerreros y saludo al sol. Esto por nombrar algunas.

Para quienes no puedan hacerlo a primera hora del día, ¿qué consejos das?

Si no puedes hacer yoga en la mañana no pasa nada, la idea es que lo adaptes a tu estilo de vida y se amolde a tu rutina. Busca un momento del día donde sepas que tienes un rato libre antes de seguir con tus actividades. La hora de la comida es muy común practicar yoga, o en la noche antes de irnos a la cama o incluso justo después de salir del trabajo.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación