Vallnord es una estación especial. Recientemente reconocida como uno de los mejores destinos internacionales por la World Ski Awards, es capaz de codearse con grandes estaciones como Kitzbühel (Austria), Val Thorens (Francia), o Cortina d´Ampezzo (Italia) a la hora de valorar su calidad en el servicio, las instalaciones o el trato al público, entre otros factores. Compuesta por las pistas de Arcalís, Arinsal y Pal, sus 93 kilómetros esquiables la consolidan como una de las más atractivas para los usuarios que desean disfrutar del esquí alpino. Situada en el Principado de Andorra, cuenta con una capacidad cercana a las 50.000 personas y 66 pistas, de las cuales seis son de eslalon y siete, negras.
Entre sus múltiples actividades y servicios, cabe destacar su interesante escuela destinada a los niños, con parques infantiles para que jueguen y se diviertan, un club para pequeños de entre uno y cuatro años denominado ‘Baby Club’, o el ‘Magic Ski’, uno de los productos estrella de la estación. Allí se iniciarán en los deportes de la nieve.
Sin embargo, no se trata de los únicos lugares de Vallnord donde son los protagonistas. Y es que desde el pasado 27 de enero, 215 niños procedentes de 28 países conviven en el Principado de Andorra en busca de conseguir la victoria en las carreras del tradicional Trofeo Borrufa.
Convertido en un clásico del invierno (este año cumple su 21ª edición), se trata de uno de los eventos de esquí alpino más relevante a nivel mundial. Los participantes compiten en las modalidades de gigante, eslalon y supergigante. Se trata de una prueba que se encuentra totalmente consolidada en la estación de Vallnord, lugar al que acuden, con motivo del Trofeo Borrufa, las grandes promesas del futuro del esquí internacional.
En esta prestigiosa competición, esquiadores procedentes de todos los rincones del mundo que se encuentran entre los 11 y los 14 años, se reúnen durante cuatro días en el sector Arcalís en lo que se considera el gran encuentro de los Pirineos a nivel infantil.
Así, parece que de nuevo la entrañable estación del Principado de Andorra vuelve a acoger con éxito una prueba realmente importante con la que seguirá ganando prestigio. El mismo que cada día acumula para volver a ser una de las que reinen en los World Ski Awards, los considerados Óscar de las estaciones de esquí.
