Fränk Schleck . / Ap
La situación de Frank Schleck es complicada. Tuvo que abandonar el Tour de Francia en la jornada de descanso en Pau al dar positivo con Xipamide, un producto ya viejo en el mundo del dopaje, que no aparecía en las estadísticas de la Agencia Mundial Antidopaje por un caso positivo desde 2002. Como dato se puede decir que este producto, que en Francia se comercializaba con el nombre de Lumitens, dejó de estar a la venta en 2006. Al ser considerada una substancia específica, lo que significa que si se explica su uso puede no estar castigado su consumo con una sanción, obligará a Frank Schleck a explicar como ha llegado esa molécula a su organismo.
Si no lo hace, la UCI podría considerar que lo ha utilizado como enmascarador de algún producto prohibido. Que ese diurético se considere como una substancia específica no significa que no tenga ningún poder dopante. A pesar de ser específica, el corredor sigue teniendo que explicar como ha llegado a su cuerpo y convencer con su defensa a la UCI. Si el contraanálisis que va a pedir Frank Schleck vuelve a dar positivo, el hermano de Andy deberá de explicar que no lo ha utilizado para mejorar sus prestaciones deportivas, es decir, para doparse además de dejar claro como ha llegado a su organismo. Si la UCI acepta sus explicaciones todo se quedaría en una reprimenda, pero sin ningún tipo de suspensión en su carrera. En caso contrario podría darle una advertencia o sancionarle dos años.
No es la primera vez
La duda que se plantea es si el control que le realizaron en Cap d’ Adge fue un simple control rutinario o los inspectores de la UCI habían ido buscando algo. Desde luego por sus resultados esta temporada no le habrán seguido el rastro a un Frank Schleck, que abandonó en el Giro debido a una caída que nadie vio. No ha ganado una carrera en 2012. Hay que recordar que en el Tour de 2008 el coche que conducía su padre, Johny, fue revisado por los aduaneros franceses, que no encontraron nada irregular en su interior. En 2008, Frank Schleck apareció implicado en la Operación Puerto, aunque nadie pudo probar nada contra él. Tuvo que explicar porque había realizado un ingreso de 7.000 euros en una cuenta del doctor Eufemiano Fuentes.
Manifestó ante la justicia alemana que había cometido una imprudencia y que ese dinero lo había pagado por un plan de entrenamiento. Dijo que «nunca he usado una substancia prohibida para doparme y jamás me he reunido con el señor Fuentes». El hermano de Andy Schleck había recibido la visita de su familia el día de descanso en Pau, que estaba alojada en Lourdes, y que fue a buscarle a la salida de declarar ante la policía para dormir con ellos en Lourdes, antes de partir hoy por la mañana hacia Luxemburgo. El caso de Frank Schleck, del que se ha desmarcado totalmente el equipo RadioShack, que ha dicho que ninguno de sus médicos le recetó ese producto, podría acabar en los tribunales si la muestra B vuelve a dar positivo. El corredor está dispuesto a denunciar que fue envenenado el pasado día 14 de julio y niega que se haya dopado. «Niego categóricamente haber usado ningún producto prohibido. No tengo ninguna explicación para decir como ha llegado a mi organismo esa substancia. Insisto para que se analice la muestra B, es mi derecho. Si este análisis se confirma, tendrá que pensar que he sido víctima de un envenenamiento».
El director del Tour, Christian Prudhome, comentó que lo único que podía hacer Frank Schleck «era retirarse. Era lo único posible. Según las reglas de la UCI hubiera podido tomar la salida en la etapa, pero de acuerdo con su equipo ha decidido retirarse. Nos enteramos el martes que había tenido un resultado anormal según la terminología d de la UCI, lo que abre la puerta a muchas posibilidades». El director del RadioShack, Alain Gallopin, dijo que «es mejor que haya dejado el Tour, para que el podamos trabajar con serenidad».
