Hace exactamente veinte años, un ingeniero llamado Neil Papworth de la extinta empresa Sema Group envió a través de un ordenador un SMS a otro ingeniero, éste de Vodafone, llamado Richard Jarvis. El mensaje era muy sencillo: "Merry Christmas" [Feliz Navidad]. Y aunque parezca un mensaje irrelevante, en realidad es histórico: se trata del primer SMS de la historia de la telefonía móvil.
Aún tendrían que pasar unos meses para que apareciera el primer centro de servicios de SMS, y serían dos empresas con sede en Suecia (Aldiscon y Telia) las encargadas de desarrollarlo. Pero hoy se cumplen dos décadas desde ese primer SMS; y la efeméride llega justo en un momento en que la tecnología y el modelo de negocio de los SMS está más cuestionado que nunca gracias (o por culpa de) servicios como Whatsapp, LINE y otras mensajerías instantáneas que utilizan Internet como medio de comunicación.