Teléfonos contra el aislamiento de los pacientes de coronavirus: «Están solos y eso es duro»
Un empresario madrileño promueve «COnectamos VIDas», una iniciativa que persigue hacer más llevadero el ingreso en los hospitales de estos pacientes, que solo tienen contacto con personal sanitario
Imagine una habitación. Cuatro paredes y personal sanitario que entra y sale. Le miran, le dedican palabras de aliento, pero usted debajo del gorro y las gafas no ve más que unos ojos. Un breve intercambio de frases que le ayudan a sobrellevar el silencio sepulcral que rompe esa puerta cuando se abre; la misma por la que llegan y después se van.
En eso es lo que pensaba Ignacio Ibañez cuando su mujer, que es personal sanitario, le hablaba de su día a día en el trabajo desde que estalló la pandemia por el coronavirus . La misma imagen que llevó a este empresario a iniciar un proyecto que busca llevar a los hospitales teléfonos móviles para los pacientes en aislamiento por Covid-19 que no tienen medios para hablar con sus familias. Bajo el nombre «COnectamos VIdas», esta iniciativa ha conseguido casi 500 terminales que desde hoy empezarán a llegar allí donde se les necesita.
«Mi mujer me ha ido contando la realidad de los hospitales... y las personas en aislamiento están en absoluta soledad. Solo tienen contacto con el personal sanitario . Están solos, y eso es duro», expone Ibañez. Una soledad en el aislamiento que dispara contra mayores y jóvenes. Muchas personas no cuentan con un teléfono móvil, mientras que otras llegan a Urgencias con lo puesto. «Si vas a Urgencias, que no deberías ir, sales de casa con las llaves, la cartera, el móvil... O si te ingresan por que te han hecho las pruebas y has dado positivo, igual... Pero mucha gente no coge el cargador y están con el móvil lo que les dure la batería», enumera.
Con esa premisa, este empresario consiguió, gracias a «su red de contactos», que LG España donase los 492 terminales y que Orange facilitase las tarjetas SIM con datos para no depender, ni saturar, del wifi de los hospitales. Junto con ellos, Redradrix, la empresa de este madrileño, espera poner su granito de arena en esta crisis. «Fue casi de un día para otro y estamos montando todo en casa . Hay que ensamblar los terminales, cargarlos, encenderlos, quitarles el pin… Empaquetar y distribuirlos por los hospitales . Están identificados y yo tengo un registro de a dónde vamos a mandar cada teléfono», ahonda.
Todos estos terminales se entregarán esterilizados y solo se podrán usar en zonas de aislamiento para evitar , entre otras cuestiones, la transmisión del virus. «En casa lo hacemos todo con guantes y esterilizamos los móviles. De ahí, van a la caja y a los hospitales», expone Ibañez. Su modelo o antigüedad no importan, pero sí que en la medida de lo posible sean todos teléfonos inteligentes, para los casos en que el paciente quiera hacer una videollamada con sus familiares pueda hacerla.
Este proyecto comienza este lunes su reparto y mañana llegarán los primeros terminales a los hospitales de La Paz y La Princesa , en Madrid. Y, aunque estaba previsto que se quedasen dentro de la Comunidad de Madrid, algunos teléfonos irán fuera de la región. «Hoy justo se hace un envío a un voluntario que nos está ayudando en Zamora y van a Ponferrrada, por distintos hospitales de León. Hemos visto que hay otras comunidades que también tienen estas necesidades », explica. El «plan», según plantea este empresario, es que en cada centro haya una persona de enlace, un «aliado interno», que tenga control sobre ellos y su logísticca.
«Los centros a los que estamos llamando nos dicen que es bestial , porque es algo importantísimo. Hemos tenido buena recepción», reflexiona. Desde mañana, la vida de estos pacientes puede que sea un poco menos solitaria y sientan de cerca el calor de los suyos.
Noticias relacionadas